Mi voz es tuya

Capitulo 66

Taehyung secó las lagrimas de su chico, no podía creer el tiempo que había pasado, lo mucho que Jungkook había crecido bastante y se veía precioso ante sus ojos, en todo el tiempo que estuvo en coma parecía un sueño para él, porque estaba junto a Jungkook, pero no podía tocarlo, no se imaginaba lo mucho que su chico había sufrido, se acomodó en la cama dándole un espacio a Jungkook para que se recostara junto a él, el menor no dudó en abrazarlo.

—Hyung... ¿Cuándo despertó? Seokjin Hyung dijo que planeaban desconectarlo —Habló.

—Bueno... Primero, desperté ayer bastante tarde y... Mamá si... Quería desconectarme porque... No ve-veía que fuese a despertar —Contó.

—No lo hubiera permitido —Jungkook lo miró.

—Se que no... Yo debía-debía despertar, por mi familia, por ti —Habló.

—Hyung, tu habla esta un poco, como decirlo sin que suene mal —Taehyung no se aguantó la risa.

—Estuve mucho... Mucho tiempo en coma, es... Normal —Dijo.

—No importa Hyung, mi voz es tuya, así que yo hablaré por ti —Taehyung sonrió.

—Hyung me dijo que... Dejaste de hablar to-todo este tiempo —Jungkook se mordió el labio.

—Mi habla mejoró de a poco porque todos los días venía a hablarte, así que mejoró muchísimo. Yo ahora tengo un lugar donde personas con mutismo van y expresan sus emociones a través del arte —Contó. —Su nombre es mi voz es tuya, porque me lo dijiste a mi y tu lo eres todo para mi —Habló.

—Estoy muy... Orgulloso de ti —Taehyung lo apretó más a él.

—Hay muchas cosas de las que quiero contarte —Sonrió.

—Tendremos mucho tiempo para hablarlo, también de... Conocer bien esos tatuajes que tienes ahora, por el momento... Solo quiero tenerte para mi —Dijo mirando los labios de Jungkook.

Sabia bien a lo que Taehyung se refería, no era tonto, podía comprender a lo que iba todo aquello, pero sentía que tampoco era el momento indicado, sobre todo porque Taehyung estaba recién despertando, pero tampoco podía resistirse a los labios del mayor, todos los años que aguantó poder besarlo, sentirlo tan suyo era sin duda una locura, también lo extrañaba, extrañaba ser suyo, que Taehyung fuese suyo, ambos pertenecerse al mismo tiempo, el cuerpo de Taehyung estaba débil por todo el tiempo que estuvo en coma, necesitaría terapia para poder recuperarse del todo, pero el tener a Jungkook ahí, pensaba en lo mucho que quería verlo, de que fuese suyo, de a poco fue quitándole a su chico la chaqueta que traía, junto con su suéter, pidiendo ver ahora los tatuajes que tenia en su brazo derecho con más claridad, lo besó con cuidado, apreciando cada uno, con cada detalle y viendo ahí mismo un Tae escrito, no podía creer que Jungkook se tatuaje su nombre, pero lo hizo y él haría lo mismo, no tenia duda de eso, besó su cuello con mucho fervor, Jungkook mordía su labio, no quería dejar escapar ningún sonido, parte de él tenia miedo, no por volver a hacerlo con Taehyung, si no porque sabia que su novio estaba apenas recuperándose y estaban en el hospital, pero parte de él lo ansiaba y mucho, el toque de Taehyung para él era más que perfecto, sus manos recorriendo su espalda con delicadeza le encantaba, Taehyung volvió a besar sus labios mientras llevaba sus manos a la hebilla de su correa cuando la puerta fue abierta, Jungkook enseguida se metió bajo las sábanas, Taehyung miró hacia la puerta viendo a Jimin y Lalisa mirarlo sorprendidos, quería ver a sus mejores amigos, pero junto acababan de quemar toda su pasión.