𝐌𝐘 𝐌𝐀𝐍 «sᴛᴇᴠᴇ ʀᴏɢᴇʀs»

45. ᴇʀᴇs ᴛᴜ

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[ ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 45 ]
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—Steve—dije con una sonrisa incómoda.

—Emma—respondió mientras me miraba de manera cautelosa—Te vi... ayer—mencionó con respecto al asesinato de ayer.

—Sí—contesté nerviosa.

—Si puedo saber—pareció pensarlo un poco—¿qué haces aquí? Pensamos que te veríamos hasta después, qué tal si Tony nota que no estás en casa.

—Tony y yo no estamos bien ahora—comente mientras sentía como mi garganta se secaba.

—¿Él sabe?—preguntó con respecto a este lugar.

—No—apenas siento que puedo hablar—Yo... solo me fui, no quiero, no puedo—y con eso exploté.

Mi boca se doblo en un ridículo puchero y comencé a llorar como un bebé.

—Emma...tranquila, está bien—me tranquilizo Steve mientras se acercaba a mi y me abrazaba.

—Ella...Ella lo rompió, solo eso me quedaba de ella, era lo único a lo que podía aferrarme.

—¿Quién es ella, Emma?—preguntó rápidamente.

—Lilith, es la chica a la cual mi padre trajo a la casa, quería que fuera parte de los vengadores y ella está haciendo todo para arruinar lo que tenía con Tony, así que ayer decidí huir de casa y llegué justo cuando paso lo del rey—dije entre sollozos.

—Emma, tranquila, te prometo que lo resolveremos, siempre que estemos juntos podremos resolverlo.

Steve siguió abrazándome hasta que me calme lo suficiente para hablar con más claridad.

—Gracias—murmuré.

—Gracias a ti Emma, te extrañé—dijo para después darme un pequeño beso en la cabeza.

Nos quedamos otros segundos en silencio hasta que él volvió a hablar—Emm

—¿Si?

—Estaba pensando en lo que dijiste el otro día—enseguida supe de que hablaba, causando que el simple recuerdo me hiciera sonrojar de la vergüenza.

—Que bien—fue lo único que salió de mi boca.

—Quiero intentarlo.