"Nosotras les damos la vida, y ellos nos dan nuestra principal razón para vivir".
Odense, Isla de Fionia, Dinamarca
Presente-¿Dónde está? ¿Está bien? ¿Qué fue lo qué ocurrió?
Strange llegó vuelto loco hasta la recepción del hospital. Una de las recepcionistas se había tomado el atrevimiento de llamarlo para informarle sobre el incidente que había tenido la doctora Hope hace poco. Eran pasadas las 10 de la noche y como últimamente venía haciendo en esta última semana, se encontraba doblando turno, otra vez.
-Por favor tranquilícese señor Strange, la doctora se encuentra en urgencias. Hace unos minutos me informaron que ya la estaban atendiendo.
-¿En urgencias? ¿Qué fue lo que pasó? ¿Sabe que me llamaron? -Benedith preguntó con preocupación, pero a la vez se permitió dar un suspiro. Había corrido como un desquiciado.
-Lo único que sé es que la doctora venía saliendo de cirugía cuando cayó inconsciente en la salida de la sala. La doctora Darcy dijo que su presión estaba demasiado baja, que lo más seguro es que hubiese sufrido una descompensación. Ella aún no sabe que le informamos... Pero era el último contacto en la agenda de su celular, no sabíamos a quién más llamar, la doctora no tiene familia...
La chica de recepción le explicó mientras el castaño maldecía entre dientes.
-Gracias, hicieron muy bien en llamarme. ¿Puedo pasar a verla? -Benedith preguntó con impaciencia.
-Si, urgencias está al final de pasillo, la puerta de la izquierda.
La recepcionista le explicó y Strange prácticamente voló de ahí para dirigirse como alma que llevaba el diablo hasta urgencias. No quería ser duro con Hope, pero debía hacerle saber que tenía que parar ya. No podía seguir doblando turno sin parar, tarde o temprano perjudicaría su salud y aquel desmayo era la prueba viviente de ello.
-¡Argh! Que no estoy embarazada, Darcy, no insistas con eso...
Hope gruñó enfadada a los cuatro vientos provocando que Strange prácticamente palideciera al escuchar aquella pequeña declaración para después quedarse plantado como una estatua justo frente a la cama donde la castaña se encontraba reposando.
-No me importa Hope, lo confirmaré en una hora...
Darcy le dijo en tono despreocupado y se encogió de hombros cuando Hope rodó los ojos y la fulminó con la mirada. Sin embargo, fue la inesperada reacción de Strange lo que las hizo a ambas levantar la mirada y ladear la cabeza en su dirección.
El pobre hombre casi se atraganta con su propia saliva por la impresión que se llevó.
-¡Hey! ¿Estás bien?
Darcy se puso de pie rápidamente y fue hasta el extraño para darle varias palmadita en la espalda a lo que Strange asintió con la cabeza mientras trataba de recomponerse.
-¿Ben qué haces aquí? ¿Quien te llamo?
Hope abrió los ojos con sorpresa e intentó ponerse de pie, pero Darcy volvió hasta ella y la obligó a mantenerse recostada. La bolsa con suero que le habían puesto aún se llevaría algo de tiempo en terminarse así que prácticamente estaba prisionera en urgencias.
-Sólo me llamaron, vine lo más rápido que pude. ¿Estás bien? ¿Que fue lo qué pasó, Hope?
Ben le dijo sin más y fue muy evidente para ambas doctoras que el pobre castaño estaba realmente angustiado por ella. Sus ojos de bobo no mentían y eso fue sin duda algo que consiguió conmover al corazón de Hope, la gente no solía preocuparse por ella.
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🌊 𝝝𝗖𝗘𝝠𝗡 𝗘𝗬𝗘𝗦 🌊
RomanceHace exactamente 5 años que una de las familias más reconocidas de España en el campo de la construcción había sufrido una ruptura irreparable que había dejado el corazón de Christopher Evans completamente despedazado. Con tan solo 28 años de edad y...