🌊 𝝝𝗖𝗘𝝠𝗡 𝗘𝗬𝗘𝗦 🌊

CAP 23 MAÑANA

"El amor no tiene cura, pero es la única cura para todos los males".

-¿Te desperté, papá?

Lucy preguntó en un tono desanimado mientras subía las escaleras para ir a su habitación. Se había levantado demasiado temprano y nadie dentro de la casa se había parado aún para hacer el desayuno.

-¿Qué? ¿Mi amor, qué sucede? Son las 6 de la mañana. -Chris soltó con un tono pastoso y agotado mientras se sentaba sobre el colchón.

El hombre de había despertado de golpe para responder el teléfono que no había parado de sonar sobre la mesita de noche. Se sentía desubicado, adormilado, desnudo y la poca luz se colaba en la habitación lo hizo sentir que sus ojos se cerraban poco a poquito.

-Nadie ha despertado en casa, papi. ¿Me pasas a mami, Rose? La extraño mucho. -Lucy se quejó en un tono infantil que hizo despertar al rubio de nuevo.

-¿Qué? ¿mami?

Chris se pasó la mano sobre el rostro y se despeinó un poco para obligarse a abrir los ojos por completo y parpadear un poco para esclarecer la vista.

-Si, mami. Quiero hablar con ella, papi.

Lucy repitió impaciente mientras el cerebro de Evans le regalaba una increíble y erótica película que recapituló fugazmente todo lo que había vivido durante la noche. La hermosa mujer que yacía completamente desnuda y enredada entre las sábanas de seda que cubrían su cama había sido su cómplice de travesuras y eso lo hizo suspirar.

Aunque ahora ella se encontraba profundamente dormida mientras le daba la espalda.

-Mi amor... Mami aún sigue dormida, hay que dejarla descansar un poquito más, aún es muy temprano.

Chris sonrió como idiota, bajó la voz y estiró su mano para recorrer su dedo índice sobre aquella perfecta curva que se forma en la espalda de su pequeña sirena escandinava, provocando que su toque la hiciera ronronear entre sueños y girar sobre su lugar para quedar esta vez recostada boca arriba.

-De acuerdo, papi. ¿Vendrán a cenar a la casa de la abuela? -Lucy se acosto en su cama y siguió con su charla mientras el rubio se levantaba de la cama para buscar un chándal que lo cubriera un poco.

-Claro que si, mi cielo. ¿Por qué no intentas dormir, hija? Más tarde te llamaré para que puedas platicar con Rosie. -Evans bostezo y salió de la habitación en dirección a la planta baja.

Necesitaba un buen café caliente.

-Ok papi... No olvides alimentar a Summer y Sunny. -Lucy bostezo y sintió como sus ojitos se iban cerrando de nuevo.

-Ellos están perfectamente bien, amor. Confía en mi, soy el mejor cuidando conejos. -Ambos sonrieron al teléfono.

-Papi, ¿puedo preguntarte algo? -Lucy soltó antes de que colgara la llamada.

-Dime, amor. -Evans se sentó en un banquito de la cocina mientras esperaba a que la cafetera terminara su trabajo.

-¿Tu crees que dos personas que se odian mucho pueden quererse así como mami y tu se quieren? -La niña rodó en la cama y se quedó boca abajo mientras esperaba una respuesta.

-Hmmm... Bueno, tú abuelo solía decir que del odio al amor solo había un solo paso. Él vivió algo muy parecido con la abuela cuando jóvenes y no ha existido una pareja que yo haya conocido más enamorada que ellos. Tus abuelos se amaban mucho, amor. -Chris respondió para después fruncir el ceño. Estaba seguro que su hija de nuevo se había desvelado junto a Liz viendo películas.