Por el beso de una dama

Hijos de Isveria

El rostro de Edmond enrojeció ante la humillación, dos Birdwhistle, dos rechazos, y esta había sido la peor pues era pública, los murmullos sonaban a su alrededor, la gente hablaba de él, ahí, frente a los malditos Crawford.

El imbécil de Newt Crawford se burlaba de él con la mirada mientras abrazaba a Primrose, pero se las pagaría, todos ellos se las pagarían, maldita la hora en la que buscó amistad con los Birdwhistle.

Ed abrió la boca a punto de replicar, pero una voz más llamó la atención de todos los presentes.

- Si me permiten unos minutos.- Penny habló desde un estrado improvisado, vestida de forma elegante y majestuosa  luciendo su corona de reina, un vestido de los colores Greengrass y el emblema de hoja de olivo de la familia.

Todos dirigieron su atención a la Reina, Paul estaba a su lado, en su traje militar.

- Agradezco a todos el sacrificio de dejar a sus familias y enfrentarse a lo desconocido en nombre de nuestro amado reino, todos y cada uno de ustedes son ya héroes de nuestra nación y sus nombres quedarán grabados en la historia de la victoria, pues una nación como Isveria solo es fuerte por sus habitantes, ustedes la construyen con su trabajo, con su voluntad, somos hijos de Isveria, y los hijos de Isveria nunca mueren.- dijo Penny con emoción, sabía que muchos de los jóvenes y adultos que veía en uniforme no volverían y que seguía una época oscura de tristeza y lágrimas, pero solo esperaba que la recompensa fuera la paz para las futuras generaciones.

El momento había llegado, la última despedida, los corazones latían agitados.

Antoinette acarició la mejilla de Niel y buscó a Newt con la mirada, Niel también, lo encontraron aún con Prim.

- ¡Newt!- lo llamó Niel, el menor de los Crawford respondió al llamado y se apresuró a despedir a su madre, Prim se acercó, al menos su madre se quedaría con Dhalia, la hermosa Antoinette Crawford se quedaría completamente sola, como la nueva nuera, Prim sintió la necesidad de proteger a la mujer.

Miró a los hermanos, juntos era indiscutible su parentezco, tal vez por la aterradora y emotiva situación, Prim notó diferente a Niel, más, humano, Prim sonrió ampliamente.

- No peleen, portense bien... los dos- rió la rubia, los hermanos la miraron con sorpresa y luego con diversión.

- Y tú cuida a mi Madre, trata de no arruinar mi casa, Birdwhistle.- sonrió Niel, no lo decían, pero habían llegado a un silencioso acuerdo de paz.

Se quedaron en la explanada hasta verlos desaparecer en la lejanía sobre sus caballos, encabezados por Lyn, y Paul.

El vacío en la población era casi tan grande como el vacío emocional de cada uno de los que se quedaron.

Penny organizó una reunión para las familias que se quedaban en el Palacio, el salón se llenó primcipalmente de mujeres, hijas y esposas de los soldados, todas con gesto sombrío.

Birdwhistle y Crawford se mantuvieron en la misma zona por la reciente familiaridad.

Antoinette estaba especialmente cabizbaja, pensativa, Tulip tomó el rol de matriarca, algo le decía que ella sería quien tomaría el papel de cuidadora principal de no solo sus hijas sino de la misma Marquesa.

- Marquesa, ¿ya probó el canapé?, el sabor es sutil y agradable.- invitó Tulip con el único fin de sacar a Antoinette de sus muy posibles pensamientos sombríos.

La mujer dirigió sus azules ojos de muñeca desorientados hacia Birdwhistle.

- Por supuesto, sí- afirmó mecánicamente, Tulip sonrió amable y se acercó a ella, Prim intercambió lugar para acercarse a su hermana y dar mayor privacidad a su madre y la Marquesa.

- Piensa en el Marqués y los muchachos.- afirmó Tulip en voz baja.

Antoinette la miró con inmensa preocupación.

- Lyn tiene una herida en el hombro que nunca sanó, levantar un rifle ya es un doble esfuerzo, Niel solo ha ido a misiones pequeñas, nada peligroso, no ha experimentado ser un soldado de verdad, y Newt, mi Newt, él no es un hombre de acción, Newt es como mi padre, hombres pasivos, con talento entre libros detrás de un escritorio.- las palabras de Antoinette resultaron más oscuras de lo que Tulip pensaba, ni ella pensaba tan pesimista de su esposo visiblemente pasado de peso y su hijo en misma situación que Niel, por lo que buscó la manera de levantar el optimismo de la mujer.

- Esta no es la primera vez del Marqués, es un hombre fuerte, inteligente, pináculo de lo que Isveria representa, siempre lo ha sido, no hay duda alguna de que si alguien volverá, será él, seguido de sus hijos a quienes protegerá sin descanso, a pesar de que ambos son sumamente capaces de cuidarse, pues fueron criados de forma excepcional por usted, y son una perfecta combinación de fuerza, inteligencia y voluntad, no tema, el apellido Crawford es parte del espíritu de Isveria, no hay forma de que se extinga.- rió Tulip trayendo a su memoria ciertos recuerdos de su juventud.

Antoinette lo percibió y esbozó una pequeña sonrisa curiosa.

- ¿Usted ha vivido en Isveria toda su vida?- preguntó Antoinette, le pareció curiosa la forma en la que Tulip mencionó como Lyn "siempre había sido así".

Tulip asintió sin sospechar la curiosidad de Antoinette.

- Nosotros los Nielssen somos de las familias más antiguas en Isveria, desde los tiempos de Gasostorm antes de la unificación.- rió Tulip orgullosa, la sonrisa de Antoinette se petrificó.

- ¿Los... Nielssen?- preguntó.

- Sí, Nielssen es mi apellido de soltera, hacía años que no lo decía en voz alta, y desde que mi padre y mi hermano fallecieron tampoco se escucha en sociedad, es una lástima...- suspiró Tulip.- ... yo solía ser como Prim, pero perder a los hombres más importantes de mi vida y el matrimonio me hicieron madurar.- recordó Tulip con cierta melancolía.

"NIELSSEN"

Repitió Antoinette una y otra vez en su mente, ella no era de Isveria, viajó desde Cardos en su juventud, específicamente para casarse con Lyn, nunca escuchó de los Nielssen, tenía sentido si ambos hombres Nielssen habían fallecido antes de la boda de los Birdwhistle.

"NIELSSEN"

Su relación con Lyn era cordial, un poco intimidante, pero cumplieron sus deberes de asegurar el legado, nunca cuestionó la elección de nombre de Lyn para su primogénito.

"NIELSSEN"

Todos los Birdwhistle se parecían, pero Lyn desde el día uno se mostró en afinidad con la rebelde hija menor, aquella que era como su madre en su juventud, le recordaba a Tulip Nielssen, ... y eso lo hacía sonreír como nunca pudo la misma Antoinette.

Casi 30 años de matrimonio y justo esa noche descubría tal vez el mayor secreto guardado de su marido, Antoinette quedó fascinada, le hubiese gustado tener el valor de preguntarle a Tulip la historia completa.

Por otro lado, Dhalia, Maddie y Prim conversaban.