Sirius ingresó con paso lento y triunfante a Grimmauld Place, aquellos paseos como hombre libre por las calles de Londres eran un nuevo hábito que había adquirido desde el juicio. A decir verdad, le encantaba salir a comprar o a pasear como todo un muggle sabiendo que ningún maldito auror lo perseguiría.
Aquel día había ido a comprar pasteles a una pastelería muggle que quedaba en una calle paralela, pero se entusiasmó rápidamente al ver una botillería y, de paso, a un trío de jóvenes hippies que venían saliendo de una tabaquería, quienes le dijeron que estaban saliendo al fin diferentes paquetes de tabaco más natural para hacer de manera artesanal.Sirius obviamente fue a comprar todo lo necesario y se devolvió a casa con gran entusiasmo.
ㅡ¡Chicos! ¡Bajen y vean todo lo que traje!
El primero en llegar fue Harry, quien se había mudado oficialmente con Sirius una semana antes del juicio para formar aquella familia que Black le había prometido anteriormente. Potter juraba que nunca antes se había sentido tan feliz y perteneciente a un lugar.
Vianey, Hermione y los gemelos siguieron a Potter hasta el comedor, en donde Sirius le pidió a Kreacher que sirviera los pasteles en la mesa.ㅡ¿Tantos pasteles para nosotros cinco? ㅡpreguntó Hermione al ver la variedad de dulces frente a ella.
ㅡGranger, tú solo disfruta... ㅡcontestó Fred.
ㅡCalla y come ㅡcontinuó George al mismo tiempo que pasaba su dedo por el merengue de un dulce.
ㅡY... ¿Y no podríamos invitar a...?
Hermione se calló de repente, estaba a punto de mencionar un nombre que la condenaría. Vianey dejó de masticar y subió su mirada lentamente hasta conectar sus ojos violetas con los de su mejor amiga, la cual se estaba sonrojando.
ㅡ¿Invitar a? ㅡla rubia tenía su boca llena, pero de todas formas quería incitar a su amiga a continuar. No obstante, Vianey sabía perfectamente a quién se refería, en su línea de tiempo original todo el mundo mágico conocía el nombre del marido de la ministra de magia.
Hermione prefirió comenzar a comer, afortunadamente solo su amiga la había escuchado.
ㅡOigan, ¿y Weasley no querrá venir?
La castaña comenzó a toser y miró a la hippie con reproche.
ㅡ¿Cuál de todos? ㅡcontestaron los gemelos al mismo tiempo.
ㅡRon.
ㅡInvítalo ㅡsugirió Sirius, pero Harry lo interrumpió explicando que estaba bastante ocupado, ya que tenía mucha correspondencia pendiente que le había llegado de Lavender Brown.
Hermione se quedó en completo silencio y Vianey la observó con preocupación; la castaña se levantó de la mesa disculpándose y subió las escaleras, por lo que la rubia decidió seguirla.
ㅡ¿Herms? ㅡgolpeó un par de veces la puerta-. ¿Puedes abrir, por favor?
ㅡPrefiero estar sola un momento, Vinny... ㅡse escuchó la voz ahogada de la chica-. Por favor... Bajaré luego de despejarme...
Y así fue, cuando Granger bajó hasta la cocina encontró a los gemelos, a Sirius y a Vianey bebiendo una copa de un licor medio rosado, mientras que Harry estaba bebiendo cerveza de mantequilla. Lo primero que hizo la Gryffindor fue quitarle el vaso a su amiga y beberse casi todo el contenido.
ㅡLo necesitaba ㅡdijo antes de recibir algún reclamo de la hippie-. ¿Qué era?
ㅡEspumante con ramazzotti y jugo de piña ㅡrespondió Sirius con una mirada que la leona no supo descifrar: era divertida, pero sorprendida y un tanto preocupada.
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『STILL AS EVER: NEVER ENOUGH ║ Tom Riddle』 》Precuela
FanfictionLa precuela de la novela Still As Ever narra la historia de Vianey Jung antes de su viaje a la década de los 40, mostrando su travesía por el Hogwarts del Trío de Oro y sus hazañas, junto con las travesuras, romances y acciones de aquellos tiempos...