『STILL AS EVER: NEVER ENOUGH ║ Tom Riddle』 》Precuela

Capítulo 56 ~ Crimen

Cuando Vianey se topó con Harry simplemente pensó una cosa: "Ese Felix Felicis no era una poción común, tenía hongos alucinógenos de seguro". Sino, no se explicaba el comportamiento de su amigo.
El chico la invitó a ella y posteriormente a Slughorn para que fuesen a visitar a Hagrid, Potter iba sumamente eufórico y la hippie le daba algunas miradas entre divertidas y perturbadas.

"Marihuana... Definitivamente tenía marihuana".

Mientras caminaban, Vianey miraba los árboles para no interferir en el monólogo que Slughorn le daba a Harry; sin embargo, una vez que llegaron con Hagrid, la hippie volteó a ver el gran cadáver de la acromántula y ahogó un grito, alejándose un par de pasos.

ㅡ¿Señorita Jung? ¿Se siente bien? ㅡpreguntó Slughorn al ver a la chica con su rostro pálido y sus ojos cerrados.

ㅡNo, señor... Soy aracnofóbica.

Harry se le acercó y le tomó la mano, Vianey al sentir que su amigo la tironeaba para acercarse, abrió sus ojos y comenzó a reclamar.

ㅡNo iré, me rehúso a acercarme a esa cosa.

ㅡVinny, tienes que darle las condolencias a Hagrid.

ㅡ¡Mi pésame, Hagrid! ㅡgritó mientras seguía tironeando su mano para zafarse del agarre del chico, para luego murmurar-. ¡Una mierda, Harry! Ni creas que me voy a quedar.

ㅡVinny, por favor.

ㅡPor favor nada. ¿Sabes lo que haré? Iré a ver a Draco, porque tú y el profesor pueden quedarse consolando a Hagrid. Te juro por Buda que yo no puedo quedarme aquí ㅡde reojo vio nuevamente el cadáver de Aragog y con todas sus fuerzas se soltó, se despidió de ambos y se fue de allí.

Caminó por los terrenos en dirección al castillo, cuando llegó a la Enfermería se aseguró de abrir con cautela primero la puerta y observar hacia dentro. La vez anterior había entrado sin aviso y sorprendió a Astoria Greengrass hablando con Draco, por lo que la castaña, apenada, se retiró para que pudiesen estar ambos solos. La rubia no quería otra escena similar, pobre Astoria.
Esta vez fue buena idea abrir cautelosamente, pudo ver de nuevo a ambos chicos: Astoria parecía despedirse de Malfoy como si su visita ya hubiese acabado, la chica iba regularmente a preguntar qué tal estaba cuando le tocaba ir a dejar pociones nuevas a Madame Pomfrey para su inventario.

Una vez Greengrass se dirigió a la puerta, ella ingresó. Internamente Astoria se preguntó cómo podría llamar siquiera la atención de Malfoy cuando existe Vianey en su vida, la observó algo intimidada por el porte y la elegancia que desprendía la hippie al caminar; nunca había cruzado palabras con ella antes.

ㅡHola Tori ㅡsaludó simplemente Vianey con una sonrisa cálida. La castaña al ser más tímida se sobresaltó un poco antes de responderle el saludo y salir por la puerta.

Conocía a Vianey por ser compañeras de casa, por su personalidad extravagante, su fama rompecorazones y mil cosas más, incluyendo una conversación que tuvieron Astoria y su hermana Daphne en la cual esta última le confesaba haber besado a la hippie en un juego de verdad o reto durante su quinto año, declarando que la rubia besaba espectacular y podría hacer a cualquiera dudar de su sexualidad, incluyéndola.

ㅡ¿De nuevo con Greengrass? ㅡpreguntó con gracia, sobresaltando al rubio que yacía en su cama-. ¿Cuándo te dan el alta?

ㅡQuizás hoy o mañana, princesa.

Vianey avanzó lo suficiente hasta poder sentarse a la orilla de la cama, Draco la observó por unos eternos segundos, fijándose en la mayor cantidad de detalles posibles: su largo cabello rubio, sus puntas teñidas de un rosado desteñido, un rostro suave y claro, portador de unos labios que se veían suaves y de un par de amatistas que se escondían detrás de unas largas pestañas.