Me perdonan por dejar a Fran tan olvidado en el primer libro? /_ \ 👉👈
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Dolor, era lo único que se sentía en el santuario, todo empezando con la ultima pelea, no orquestada por su principal enemigo esta vez. Si no por sus propios compañeros y patriarca. Ni con toda la preparación metal que tenían al momento de empezar su vida como Santos, era un sentimiento que aprendían a evitar, ahora se tratada de traición y aun les faltada mucho por superar para esta inmunda guerra.
El santo de Tauro no sabia bien como reaccionar, no había visto a la Saint de zorro desde hace unos días, sintiéndose ese tensión de completo silencio entre los 2. Era un ambiente muy pesado en ese momento. Sage y Hakurei en ese momento estaban buscando adaptarse a sus nuevas tareas, y organizarse desde 0.
Athena por su parte, acompañada por Krest buscada, primero consolarlo por la perdida de su gran amigo y antiguo compañero de armas, aunque este insistía que no tenia ningún problema, que solo se sentía decepcionado por el hecho que ese hombre que conocía de manera casi perfecta haya caído en estos arrebatos de poder, más no quería expresar mucho.
Segundo, buscando hacer guiar a los gemelos lemurianos para volver todo en orden antes de que la perdida de compañeros les juegue en contra. Volviendo a Francisca, quería de verdad volver a hablar con la Saint, pero en este momento ella parecía editarlo.
La conocía, quería darle tiempo. Pero en ese momento se odiada por recordar nada de lo que paso cuando estada controlado, tenia miedo de haberla herida de forma inconsciente, ya que estada llena de heridas, aunque le hubiera dicho que había recolectado a varios Santo de Bronce y Plata para no perder miembros, debido al poder de los dorados, era algo que no estada seguro de creer. Estada asustado.
Asesorándose con Krest, tauro busco dejarle un pequeño detalle con una nota, le había dicho que las orquídeas en su color blanco eran un símbolo de pureza y elegancia, que se regalaban a su amor profundo. Y que las rosas eran símbolo de femineidad, gracia y alegría.
- ¿Estas seguros de darle esas? Se suelen usar para representar un matrimonio. - Le hizo saber Krest antes de que Francisca vaya con ella, mirando las flores en su mano dudando mucho sobre sus palabras. Antes de asentir.
Y si, lo sabia. No podía casarse, era una aspiración nula que no podía tener, y de fantasear seria luego de terminadas las peleas. No le molestada la idea. Más bien, le hacia un poco de ilusión saber que era capaz de llegar a eso. Ninguno había tenido vida lejos del Santuario, siempre fueron santos.
- "Seria un poco raro ese cambio" - Se dijo a si mismo, dejando el ramo junto a un lugar donde sabia que lo encontraría. Con la nota:
"Deseo verte y preguntarte que paso. No recuerdo mucho y este silencio entre nosotros me pone bajo angustia."
"T"
Tal vez fue muy directo pero no encontró forma de hacerlo más sutil sin que pierda los que quería transmitirle ahora.
Fran había dejado la armadura guardada, se quedo en un ropa más casual esperando a la mujer, residiéndola con un rostro nublado de incertidumbre, inseguro de que decirle cuando la tuvo frente de querer verla a los ojos, pero sonriendo al momento de que lo hizo. Teniendo sus hermosos ojos clavados en los suyos, acercándose de forma sutil, deseando abrazarla, un poco más atrevido y llevarla a su cuarto para hacer el amor entre los 2 un largo rato.
Pero se quedo feliz al momento de abrazarla.
- No me hiciste nada. Dije la verdad sobre el porque de mis heridas. - Como si le leyera la mente le hizo saber, calmando al santo de Tauro por unos pocos momentos. Suspirando contra su cuello.
- Me reconforta saber eso. No quiero imaginar, como hubiera sido el peor de los casos. - La chica le acaricio el cabello, pasando sus manos por su rostro para que lo vea a la cara. notándolo muy inquieto, muy asustado tal vez. - ¿Tus heridas no fueron grades verdad? - La chica negó.
- Me siento mejor. Aunque mis heridas fueron profundas, dentro de poco estaré completamente lista. Estoy segura. - Si bien Tauro seguía intranquilo, acepto sus palabras, acercándose para robarle un beso en los labios. Abrazándola de forma casi posesiva, dejando reconfortarse entre sus manos. - Por cierto... Lindas las flores.
- ¿Sabes lo que significan? Krest me ayudo con ellas.
- Sé lo necesario.
- Bueno, creo que seria lindo bonito esa posibilidad. - La chica sonrió, acariciando su rostro mientras este hacia lo mismo. - Sé que solo es una fantasía, pero ¿Tu no?
- Si lo seria. Aunque no creo que solo sea fantasía.
- Se a lo que te refieres. Pero lo veo complejo. Mejor no hablemos de eso. - Altas ganas de decirle algo en ese momento, que solo quería quedarse con ella para vivir tranquilo como Gold Saint, no obstante toda la situación vaya que lo dejo fuera de si mismo. Pensó mejor, buscar demostrárselo con sus acciones, aunque dudaba como hacerlo bien.
De ese tema no hablaron más. Fran quiso dedicarse a cuidarla, si bien sus heridas ya estaban mejor no quiso apartarse de ella un rato, puede que aun siguiera con esa incertidumbre en la mente, o solo estada exagerando con la sobreprotección. Sin importarle eso, le reconfortada estar los 2. Preparándose mentalmente para un futuro, pero dejándose ser feliz al lado de la mujer que amada en medio de todo eso.