Muchas cosas han sucedido en la vida de los Morgan, pero la aventura no termina. Su historia está por enfrentar el comienzo de un nuevo siglo y los cambios que vienen con él.
A los pies del siglo XX, la llegada de Marie está más presente que nunca...
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5 de mayo 1897. White Oak, Minnesota.
Jonathan tomó la bandeja con el desayuno que una de las empleadas había subido y esperó hasta que Olivia se hubo sentado en la cama para apoyársela sobre las piernas. Ella bostezó y se acarició el cabello, todavía adaptándose a sentirlo tan corto.
—¿Qué hora es?
—Las ocho. Lizzie se fue a la Universidad con Harvie y Eleonora y avisó que se quedaría a terminar sus invitaciones para la boda y las iría a dejar en el correo antes de regresarse con Ethan —. Olivia asintió y se sirvió una taza de café con dos cucharadas de azúcar. Untó algo de manteca en una de las tostadas y preparó otra para Jonathan, ambas con azúcar por arriba—. Dormiste muy bien anoche.
—¿Uhm?
—Me refiero a que no tuviste pesadillas.
—¿No? —. Jonathan negó y terminó de calzarse las botas y se acercó a la cama para sentarse a sus pies—. Siendo sincera, Edwards me ha ayudado bastante, no sé si es porque sabe qué decir en cada ocasión o porqué finalmente estoy sacando todo eso que me tenía guardado, pero me siento mucho más ligera.
—Me alegra, ángel, me tenías muy preocupado —. Mordió su tostada y compartieron la taza con café. Él arrugó la nariz al beber.
—¿Amargo? —. Jonathan asintió y Olivia le agregó otra cucharada de azúcar—. ¿Tú saldrás?
—No, solo iba a visitar a Faith en el establo y hacerle algo de mimos, hace tiempo no la monto y no quiero se deprima.
—Yo debería hacer lo mismo con Thunder —dijo refiriéndose a su caballo.
—¿Quieres acompañarme? Podemos aprovechar el sol juntos.
Se lo pensó un momento y decidió aceptar y continuar avanzando un paso a la vez para volver a la normalidad. Julio sería un mes de bodas y ella ya quería estar recuperada para ese entonces, tal vez era un poco ambicioso, pero no quería que nada opacara las bodas de sus bebés.
—¿Geordie no se casó todavía ¿o sí? —preguntó con repentina preocupación.
—No, iban a intercambiar los votos en abril, pero con todo lo que sucedió quedó en segundo plano. Imagino lo harán esté mes en la iglesia ahora que Eloise puede andar con normalidad, pero no tienen planeado nada extravagante.
—Por un minuto pensé que se me había pasado. ¿Y cuándo harán una celebración? —. Jonathan se encogió de hombros y volvió a tomar la taza de café que ella le ofreció para darle otro sorbo—. Espero que no se distraigan con esto de ser padres y pierdan la oportunidad de tener una boda, así sea dentro de muchos años.
—Probablemente ahora sí se distraigan, especialmente Geordie, esta muy ansioso.
Olivia sonrió y preparó otras dos tostadas con manteca y azúcar para ambos.
