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Capítulo 84

Capítulo 84

El marqués Dolby apenas logró mantener su mente en otro lado y respondió con calma

─ Siempre que observe que los dos triángulos simétricos están doblados en diagonal en la parte posterior del triángulo inicial, puede doblar el pico satisfactoriamente.

Las cejas de Rubellus se movieron. Pronto el joven emperador respondió con seriedad.

─ Lo probaré.

─.....

─ Me quedaré con estos pliegues doblados. ¿No le importa si los uso como referencia?

─ Sí, puede hacerlo. Pero este, Su Majestad...

─ Este es el 502. Hay 498 más que hacer.

(NT: Te pasaste Ira, mandarle hacer 1000 grullas de papel XD.)

Rubellus murmuró para sí mismo con determinación mientras levantaba dos grullas.

Gracias a esto, el Marqués Dolby perdió el tiempo para hacer la pregunta más curiosa de todas.

¿Pero por qué está plegando grullas de papel...?

Finalmente, con la curiosidad enterrada en su pecho, el Marqués Dolby se inclinó profundamente ante él.

Rubellus se quedó mirando la lista en la esquina de la oficina después de que el Marqués Dolby se fuera.

1. Dobla mil grullas de papel (¡tú solo!)

2. Teje una bufanda con tejido de punto (¡tú solo!)

3. Escribe un diario de intercambio (iré al palacio dos veces por semana mientras lo escribas).

4. Escribe tres cartas a la semana.

5. Canta una serenata.

(NT: JAJJAJ esperen que ya me muero.... Ahora si continuemos...)

No fue una demanda financiera, no fue una demanda material. Mil grullas de papel para el emperador del país, era una demanda extraordinaria.

No hay nada que pueda hacer. Ira dijo que si no cumplo el contrato, o si se rompe el contrato, la relación de bilateral basada en el afecto se acaba.

Eso significa que me va a rechazar.

─ No puedo hacer que me rechace.

Rubellus suspiró profundamente y volvió a doblar la grulla de papel.

Aunque no hubo quejas sobre estos cinco requisitos, Rubellus aún podía saber lo que Ira estaba tratando de decirle a través de estas condiciones.

Quería decir que para Ira, no había confianza ni siquiera en el intercambio de afecto más básico.

Rubellus decidió respetar los comentarios de Ira. Por eso doblaba las grullas de papel. Aun así, no entiendo lo que significa las mil grullas de papel.

─......

Rubellus suspiró y recordó el momento en que solicitó ser el compañero de banquete de Ira.

Dije que me convertiría en un villano, o que haría lo mismo que hace 12 años... Es absurdo cuando lo pienso ahora. Es bueno que Ira no se haya reído de mí.

Pero no podía evitarlo. Porque Rubellus estaba realmente desesperado.

Quería tanto estar con Ira que solo podía decir eso.

─ Estaba loco.

Rubellus murmuró para sí mismo.

No. Para ponerlo en perspectiva, las palabras arrogantes de Rubellus comenzaron desde el momento en que el Ira tuvo una cita a ciegas.