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Capítulo 108

Capítulo 108

Su expresión seguía siendo la misma, pero supuse por sus ojos ferozmente temblorosos que ahora estaba en un gran conflicto.

Era el vizconde Horton, que llegaba a la capital desde el campo y tenía un fuerte deseo de reconocimiento. Qué difícil elección.

Tenía dos opciones, la primera era pretender conocerme y presumir frente a los invitados o tener consideración en el precioso día de su hijo y su nuera...

Pero el vizconde Horton pronto tomó una decisión razonable. No tuve más remedio que hacerlo.

Los músculos de la mandíbula de Timothy Horton se hacían cada vez más grandes. Seguramente apretó demasiado sus dientes por el problema que causó su padre.

─ Oh, Dios mío, eso es correcto. Me olvidé de hoy por un momento debido a que había un invitado especial. Como suegro, esto es una gran desconsideración.

Por fin, el vizconde Horton dio un paso atrás. Por supuesto, no pudo ocultar su expresión de decepción.

Pero no sabía a donde lo llevaba. Timothy tomó la mano del vizconde Horton y lo llevó al lugar donde se reunían los invitados.

El momento en que se dio la vuelta. Laynevonne y yo vimos a Timothy decir 'lo siento' en tono de disculpa.

Entonces, María, que estaba sentada entre la gente, dio pequeñas señas. Por supuesto, la cara de María también estaba llena de disculpas.

─ Es la primera vez que veo al vizconde Horton desde que cumplí la mayoría de edad, pero todavía mantiene sus modales.

Estábamos correctamente sentados en medio de los invitados de María. El vizconde Horton, guiado por Timothy, se alejó un poco más para situarse en la primera fila de invitados. Lenny, que estaba observando la escena, susurró.

─ Si no te hubieras quedado aquí en el medio, el vizconde te habría puesto entre la novia y el novio.

Ugh, se me pone la piel de gallina solo de imaginarlo. Le susurré de enfrente mientras ella miraba a su alrededor.

─ ¿Piensas que solo sería eso? Posiblemente me hubiera persuadido para que acepte el ramo de la novia.

─ Oh, Dios mío, estoy tan contenta de que Timothy Horton haya llegado a tiempo.

Asentí con la cabeza con fuerza y ​​le susurré de nuevo.

─ Pero... ...no parece una mala persona debido a que supo escuchar a su hijo.¿No es así?

En ese momento.

─ Empezaré a dibujar, ¡así que no se muevan tanto como puedan y miren hacia adelante!

Pronto, un pintor vino frente a nosotros y gritó, se sentó frente a nosotros y comenzó a dibujar nuestras caras y realizó movimientos con un lápiz en un lienzo ancho.

Lo había pensado desde hace un tiempo y creí que lo había visto muchas veces, y resultó que él era un pintor que los nobles solían contratar para hacer álbumes de bodas cuando se casaban.

La imagen que el artista estaba dibujando ahora es solo un boceto. Ese es el proceso original.

Hoy, simplemente esboza la disposición, los movimientos y el vestuario de las personas, y luego vuelve al estudio para comenzar a dibujar la pintura real.

El pintor tiene los bocetos y retratos que dibuja hoy, así como su propia memoria, y completa las pinturas después de descripciones y pinturas detalladas.