The New Future. [Daryl Dixon ]

76.

POV: Tom.

Escuché el estruendo y la pequeña Judith empezó a llorar.

-Tranquila, todo está bien, no fue nada, shh, shhh...-la arrullé y trataba de calmarla en mi brazos, me asomé por las ventanas y entonces vi a caminantes pasar por las calles.

Cerré la puerta, y las ventanas también, tomé mis armas con fuerza en una mano mientras traía a la pequeña Judith en el otro brazo.

-Muy bien pequeña, esto será un viaje agitado, de verdad espero que no temas mucho y por favor no llores, de acuerdo? Eres una pequeña muy valiente, sé que podrás con esto y más...-le hablé a la pequeña mientras subía por las escaleras hasta una habitación cuya ventana daba a la calle principal y la abrí para tener una forma de escape en caso de emergencia.

Vi en las calles huir a todo mundo mientras los caminantes se apoderaban de todo el lugar.

-Santa mierda...-susurré.

Rick lideraba a un pequeño grupo mientras los demás buscaban refugio. Muy bien pequeña, te quedarás aquí, de acuerdo... iré por tu padre, prometo no tardar...-le dije seguro y abrí la puerta de la habitación, pero me encontré con tres caminantes que estaban ahí.

-Mierda...-volví a murmurar y cerré la puerta, la trabé y entonces recordé que no había cerrado la puerta trasera de la casa. -Mierda...-

La pequeña Judith me observó fijamente.

-Lo siento pequeña, no repitas nada de lo que dije...-le pedí.

Agarré unas bufandas y cobijas para poder amarrarme a Judith al pecho y despejar mis brazos para poder salir de ahí a salvo y poder matar a cuantos caminantes se me pusieran adelante, ya que la puerta no aguantaría mucho.

-Muy bien, hora de irnos...-dije listo, salí por la ventana y justo cuando la cerré los caminantes ya habían derribado la puerta. -Ufff justo a tiempo...-dije y continué con el plan.

Bajé con mucho cuidado por una de las columnas de la casa y llegué a salvo al piso. Saqué mis escopetas y comencé a dispararles a los caminantes.

La pequeña traía sus orejas cubiertas por unas orejeras y una bufanda para que no se espantara mucho ni le lastimara el ruido. Corrí y corrí hasta que escuché de pronto un vidrio romperse, volteé hacia ese lugar y vi a Carl pegado en una puerta cuyo vidrio ya no estaba, los caminantes también escucharon eso y estaban yendo directo a ese lugar.

-Oh no...-dije y corrí hacia allá, disparé contra los caminantes derribando a la mayoría y entré por la misma puerta. Ayudé a Carl a cubrirla con un estante y entonces Rick abrió la puerta del garaje para que pudiéramos entrar y estar a salvo.

Ron entró primero, luego Carl y al final yo junto a la bebé, pero los caminantes ya habían entrado al garaje también y no nos permitieron bloquear la entrada, entonces Rick, Carl y yo tratamos de impedir el paso de los caminantes con un colchón.