Capítulo 82: Tristeza

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~Hakuryu

Llegué a la casa de la anciana Kaede, todos me miran sorprendidos, no esperaban verme aquella noche, puedo notar que ni Kagome ni Inuyasha están ahí. Qué raro y sospechoso ¿Habrá pasado algo? ¿O simplemente salieron a pasear?

No tenía para qué preguntar aquello, solo quería darle mi respuesta a la linda chica.

Hakuryu: ¿Dónde está Kagome?

Kaede: fue en busca de Kikyo y de Inuyasha.

Hakuryu: ¿Kikyo estuvo aquí?

No sabía que también la habían visto, de cualquier manera, fingí que no tenía ni idea de su aparición, iba a guardar nuestro encuentro en secreto como prometí.

Miroku: eso suponemos, Inuyasha salió corriendo por una presencia maligna e insistió en ir solo. Al rato vimos almas volando a lo lejos y la señorita Kagome fue tras ellas.

El monje luce mucho mejor que en la mañana, la medicina está haciendo efecto.

Kaede: no han vuelto desde entonces.

Hakuryu: voy a buscarlos.

Shippo: ¡No! A lo mejor están... —me mira y pone cara de espanto— ...¿Hablando? —se ríe nervioso.

Seguro iba a decir algo como “besándose” o “coqueteando”, que tierno, intenta protegerme de algo que sabe me haría daño.

Hakuryu: cuando esos dos están solos hacen más que hablar —me rio— apuesto lo que quieran a que Inuyasha ya metió la pata.

Siempre lo hace.

Kaede: no me sorprendería, sobre todo si se encontraron con mi hermana mayor.

Eso es mucho peor.

Miroku: pobre señorita Kagome.

Sango: ella misma se lo buscó al ir tras de ellos —suspira pesado acariciando a su gata.

¿Por qué hizo eso? ¿Por qué se daña a sí misma de esa forma?

Shippo: perro indeciso infiel —se quejó cruzándose de brazos.

¿Infiel? ¿Todavía tiene una relación con la mujer que murió? ¿Sigue inconclusa? Si así fuese, Kikyo hubiera estado con él, mas ahora huía de su presencia marcando el fin de su historia de amor y el surgimiento de nuevos —o viejos— sentimientos hacia Kagome. Era su pesadilla cumplida.

¿Realmente la está engañando? ¿De verdad es un indeciso?

Hakuryu: voy con ellos antes de que se arranquen los ojos.

O algo peor.

Salí de la casa en busca de esos dos torpes enamorados, no los veía en ninguna parte. Sí que era extraño, siempre los encontraba juntos cerca de la choza de la anciana Kaede con sus caras rojas. Luego de pensar un poco asumí que Inuyasha realmente metió la pata y que podría encontrar a Kagome en el lugar detrás del templo, era el único sitio en donde podía evitarlo. Pues no me equivoque, solo di un par de pasos dentro del campo para toparme con la chica llorando abrazando sus rodillas en el suelo.

¿Y ahora qué le hizo ese estúpido?

Hakuryu: ¿Kagome?

Ella levanta la mirada, sus ojos rojos e hinchados eran la muestra que había estado ahí un largo rato. No pierdo el tiempo y me agacho a su lado para abrazarla con solo un brazo. Se acurruca en mi pecho y su brazo sano rodea mi abdomen con fuerza.

Está destrozada.

Hakuryu: ¿Qué pasó? ¿Estás bien?

Kagome: lle..llévame al futuro —ruega.

InuYasha A Través Del TiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora