Al otro día despierto muy temprano, como si fuese a la escuela, salvo que me encontraba en la época feudal donde no hay, no sé si eso es bueno o malo, pero no me quejo. La entidad educativa no es lo mío pero hago mi mayor esfuerzo.
Recordar el mundo actual me lleva directamente a mi hogar ¿Cómo deben estar en casa? El pobre de Sota debe seguir tan asustado como cuando vio al ciempiés meterme al pozo a la fuerza, el abuelo haciendo algún conjuro con pergaminos que no sirven tratando de sacarme y mamá preocupada. Me pregunto si le habrán dicho a papá. Eso sí que sería un gran problema. No quiero ni pensar que diría mi desagradable hermano mayor Rukawa o si papá cometería alguna locura, como suele hacerlo.
Me siento sobre el futón, algo dormido bostezo, me estiro un poco, al voltear me encuentro al orejas de perro sentado a mi costado, apoyado en la muralla de madera observándome detenidamente. Mi grito de espanto se escuchó por toda la aldea.
Inuyasha: ¡Si vuelves a gritar así voy a..! —fue interrumpido por las hermanas entrando a la choza.
Kagome: ¡¿Qué ocurre?!
Inuyasha: este inútil se asustó conmigo.
Kaede: con esa cara de pocos amigos asustas a cualquiera, Inuyasha.
Inuyasha: ¡¿Y usted qué se mete anciana?!
Kagome: ¡No le hables así a mi hermana!
Se detuvo en seco, sorprendido miraba a la mujer mayor.
Inuyasha: ¿Es la pequeña niña? —sus ojos estaban muy abiertos por la impresión.
Kaede: han pasado 50 años desde que fueron sellados, es normal que una humana como yo envejezca.
Se notaba que estaba atónito por la noticia, pero eso no fue impedimento para que lanzara otro comentario venenoso.
Inuyasha: los humanos son tan débiles.
Hakuryu: al menos somos más agradables que tú —le respondí molesto.
Inuyasha: ugh, te voy a... —la azabache lo vuelve a interrumpir.
Kagome: ¡Ya deténganse ustedes dos! Ambos necesitan desayunar —abre la canasta que traía en las manos, sacando comida que lucía deliciosa— si gustan pueden servirse.
Hakuryu: muchas gracias, Kagome, eres muy amable —me sirvo y comienzo a comer— ¿Tú no vas a comer, Inuyasha? —le pregunté después de haber comido el primer bocado. Estaba muy delicioso.
Inuyasha: ¡Ja! Yo no necesito comida preparada por humanos —en un segundo se escucha por toda la choza como le gruñe el estómago, las mujeres y yo aguantamos la risa— ¡Co..comeré solo porque lo deseo, no porque me ofrezcan! —se sienta a mi lado y se sirve una porción.
Los tres nos reímos, a pesar de su actitud el mitad bestia era una persona bastante cómica.
Kaede: aunque Hakuryu sea la reencarnación de Inuyasha, en personalidad no se parecen en nada.
Kagome: lo mismo estaba pensando, Hakuryu es un caballero, mientras que Inuyasha es un desatento.
Inuyasha: —con la boca llena— ¡¿Qué dijiste?!
Kagome: ¡Que eres un desatento, tonto!
Ambos gritan al mismo tiempo.
Hakuryu: gracias, Kagome —exclamo con la voz baja.
Ella me sonrió y continuamos comiendo. Las horas pasaron con lentitud, me sacaron las vendas porque la herida que me dejó la joya ya estaba cerrada, las discusiones del mitad bestia y la sacerdotisa nunca paraban, incluso llegaban a ser graciosas, contrario a lo que creía parecía que se llevaban muy bien. Como dos viejos amigos.
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InuYasha A Través Del Tiempo
Fanfiction¿Qué pasaría si Inuyasha fuera el que reencarna y no Kikyo? ¿Qué pasaría si cambiamos la historia de Inuyasha creando una realidad alterna? ¿Cómo afectaría esto en el transcurso de los hechos ocurridos en el manga/anime? Hakuryu Higurashi, es un ch...