Una guerra contra sí misma
Narrado en tercera persona:
7 de septiembre de 2013: 4:50 am, Sunny Hill, Colorado. Casa Silverman:
El sol le golpeaba el rostro hasta dejarla cegada, veía a sus amigas reír pero por alguna razón ella no lo hacía. Estaba sonando la campana, debían entrar a clase, pero a pesar de que sus amigas ya se habían ido ella seguía sentada en el césped, pasando sus manos sobre él como si eso la devolviera a su realidad, la caseta detrás de ella era el salón de danzas de Pale Wood, estaba sola, al parecer nadie tenía clase en ella... Pero, si estaba sola ¿Quién la estaba llamando?:
- Jane, Jane- repetía esa voz una y otra vez. A la pobre Jane no le quedó más remedio que levantarse y entrar al salón, pero de pronto, algo pasó.
Apenas toco la perilla del salón la luna se tomó el cielo, el sol ya no estaba... No había alumnos ni personas, estaba sola, y esa voz seguía llamándola. Ella cerró los ojos con convicción y abrió la puerta.
Todo estaba oscuro, no había nadie dentro, la única luz que entraba era la de la gran luna llena brillante por las ventanas. El salón de danzas siempre ha sido de piso de madera y muchas ventanas, y la pared frontal del salón está hecha de espejo, solo espejo.
Jane siguió caminando hasta llegar justo al centro del salón. Cuando se paró allí un foco se prendió iluminándola, vio su reflejo en el espejo, y se dio cuenta que llevaba un vestido blanco, su pelo estaba pegado a su cara como si estuviera sudando. De la nada, desde una de las ventanas que se alcanzaba a ver en el reflejo, apareció otra Jane, ella tenía una sonrisa cínica en el rostro:
- Hola pequeña- dijo con un tono de voz que puso los pelos de punta a Jane- Veo que encontraste tu reflejo, al parecer miente... Si, él miente. Siempre miente Jane. Te abandonaron, estás sola, y debes tomar decisiones.
- No sé...No sé de qué hablas.
- Oh si lo sabes. Mírate, pequeña, pálida, gorda... Estás destruida cariño. Nadie te va a querer jamás- dijo y se rio
- Es mentira- dijo Jane con lágrimas en los ojos.
- Míralo por tu cuenta.... Debes elegir Jane y esta vez no puedes escapar.
De la nada el reflejo desaparece y el foco en el que ella estaba parada se apaga, mostrando a sus personas cercanas alrededor de ella en círculo, pero había algo peculiar. Estaban congeladas:
- ¿Papá? ¿Mamá? ¿Soph? ¿Iz? ¿Chicas? - gritaba Jane mientras las veía y se abrazaba fuertemente, las lágrimas caían sin cesar.
Jane cayó al suelo, y se abrazó con fuerza llorando, pero escuchó un ruido y levantó la vista... El espejo se estaba rompiendo y de la nada explotó. Salió agua, muchísima que la estaba ahogando.
Jane tomó aire y lo guardó en sus pulmones, mientras buscaba cómo escapar pero la puerta estaba cerrada, igual que las ventanas... Estaba encerrada. Y entonces la voz volvió, mientras le gritaba cosas que solo la herían, cosas tan dolorosas que ella empezó a lastimarse, se halaba el cabello, se arañaba la piel, pero nada funcionaba, las voces no se callaban.... Jamás lo hacían, estaba en una guerra consigo misma.
Entre más se lastimaba las ventanas más se agrietaba y en un punto, todo el salón estalló, como una caja de cristal, y ella salió corriendo de aquel lugar, estaba descalza caminando por el césped de Pale Wood cuando se encontró con una figura oscura que llevaba una capa que lo único que le dijo fue "elige o será tarde" y la empujo.
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Nuestra Última Oportunidad {Primera Parte}
Teen FictionEl último año suena aterrador, pero a veces las cosas se vuelven más llevaderas cuando tienes amigos para compartirlas. Para ellas, que han sido amigas por años y tienen un lazo inquebrantable, ese último año, podría significar el fin de su amistad...