Capítulo 11: calma

98 20 0
                                    

YoonGi finalmente recibe la tan esperada llamada de la casa Jung.

- Hola mamá.

- Hola hermanito - no esperaba escuchar a HoSeok. Estaba seguro de que al otro lado de la línea encontraría la voz de su madre.

- Lamento decepcionarte, no soy tu querida mamá. Iba a llamarte para decir que estoy de vuelta pero, insistí en que debía hacerlo yo mismo. Los problemas entre nosotros se resuelven entre nosotros ¿No crees? Mi hermano ... mi responsabilidad* - YoonGi se queda sin palabras - ¿No me vas a saludar? ¿Qué pasa hermanito? te comió la lengua el ratón. - su risa se siente como una deliciosa tortura.

- Voy para allá. - no da tiempo de que el menor responda. Debe recuperar la llave y averiguar que tanto sabe y sobre todo que ha estado haciendo en Japón.

HoSeok lleva un tiempo fuera, es claro que tiene asuntos que atender. No puede simplemente quedarse a esperar a su hermano mayor aunque, la curiosidad le pica. Quiere descubrir que pasará cuando lo tenga en frente.

En el fondo siente miedo, sabe que puede llegar a ser muy impulsivo. Ji-woo le comentó que el día que fue a buscarlo estaba bastante enojado y seguramente lo estará el doble. "Siempre puedo manejarlo", creé que sí se sale un poco de sus cabales podrá ayudarlo a encasillarse, lo ha hecho antes y se considera capaz de hacerlo de nuevo.

A pesar de parecer un roedor asustado la mayor parte del tiempo es todo un experto en calmar fieras como su hermano.

Seguramente terminará por esperarlo, de igual forma estan destinados a encontrarse y prefiere que sea más temprano que tarde.

Ahora mismo rondan en su cabeza muchas dudas, sobre YoonGi, sobre su padre y sobre la caja que estuvo oculta en sus narices por años.

Ha encontrado cierta información y ha entendido algunas cosas que siempre le intrigaron. Pero, como una bola de nieve que crece cada vez más, acabó por ganar nuevas y complejas preocupaciones.

Necesita respuestas y lamentablemente muchas de esas dependen de su hermano. Otras tantas de la señora Ota, quien esta al tanto de cosas importantes, cosas que nadie más en la familia sabe, tiene una conversación pendiente con ella, desafortunadamente ha tomado unas merecidas vacaciones. Justo en ese momento, cuando se siente enormemente apremiado por el tiempo.

No teniendo de donde escoger, está obligado esperar a su regreso. De momento para buscar sus respuestas faltantes no le queda más opción que recurrir a YoonGi.

O eso es lo que trataba de creer
Porque evidentemente existe otro motivo que lo abruma. Ese mismo que no quiere admitir y que persiste a pesar de sus constantes protestas y prohibiciones. Son inútiles sus intentos de reprimirlo y aún así se niega a reconocerlo. No acepta que muere de ganas de verlo, desde el día del juicio que lo tuvo en frente después de tanto tiempo una extraña necesidad de él ha despertado y se odia por ello, por tener ese anhelo totalmente inapropiado.

En su rompecabezas hay todavía algunas piezas que no encajan, vacíos que no logra llenar y lo más importante desconoce que tan peligroso puede llegar a ser su hermano. Lo que hace más inconveniente su necesidad de proximidad.

Tiene sentimientos que no consigue descifrar, que son una mezcolanza extraña de dolor, rencor y algo más, mucho más. No debe albergar ese tipo de sentimientos innombrables en su interior. Él no es ese tipo de persona. No es un completo enfermo y no quiere descubrirse tampoco como una mala persona. Es diferente y quiere creer que por eso lo ayudo, porque es familia a pesar de todo y no por egoístas motivos personales. Así no es él y así no fue como lo educaron.

Por eso, durante su viaje luchó fuertemente consigo mismo
Se obligó a no llamarlo de nuevo porque no quería que una vez más sus conversaciones tomaran un ritmo diferente. No quería empezar de nuevo ese peligroso juego y mucho menos terminar liado con sus propias travesuras, lidiando el solo con las consecuencias.

Reverso * YoonSeok * Donde viven las historias. Descúbrelo ahora