Una vez más

Cap 47:

(Notas de autora).

-Diálogos-.

-Pensamientos-.

*-Cartas-*.

POV HEINLEY:

Podía ver todo lo que sucedía desde donde estaba oculto, solo reina y yo poseíamos una leve sonrisa en el rostro por las palabras pronunciadas.

El amigo de mi hermano mayor, el marqués Farang se alteró -¡su majestad! ¡Esto no puede ser!- Los guardias le impidieron acercarse a reina.

-Emperatriz Navier. ¿Realmente está de acuerdo con este documento de divorcio sin ninguna objeción?- La voz del Sumo Sacerdote se oía algo molesta.

Ella negó con la cabeza -acepto el divorcio- los murmullos empezaron a surgir -y solicito autorización para volver a casarme- era el momento, me preparé para entrar. Todos estaban sorprendidos por la solicitud de reina y el silencio dominó el lugar.

-Emperatriz Navier... ¿Se volverá a casar?- El Sumo Sacerdote estaba aturdido. La cara de confusión del emperador Sovieshu, me hizo soltar una carcajada.

-¿Subo ahora?- Al verme, los murmullos estallaron de nuevo, me paré junto a mi amada y me quite el velo.

-¡Navier! Ese hombre...- Reina interrumpió a Sovieshu.

-Es con quien me voy a casar-.

POV NAVIER:

Estaba tensa por completo, pero tener a Heinley junto a mí me calmaba un poco.

Me giré hacia Heinley, su mirada esta vez me decía lo mucho que me amaba, sonreí levemente. Los murmullos aumentaron aún más cuando todos notaron quien era el hombre con el que me casaría.

-¡No puede ser!- Gritó aturdida Rashta alternando su mirada entre Heinley y el duque Elgy, quien fingía sorpresa.

El Sumo Sacerdote se aclaró varias veces la garganta -emperatriz Navier, ¿es eso cierto? Príncipe... No, rey Heinley, ¿lo dice en serio?-.

-Si- respondimos al tiempo.

-Deseo que Navier sea mi reina- continuo Heinley sonriendo brillantemente.

-¿Qué estás haciendo en otro país?-.

-Proponiendo matrimonio-.

-Rey Heinley- él se giró y le suplico al Sumo Sacerdote.

-Su excelencia. Volveré de forma oficial luego, pero si pierdo esta oportunidad ahora, será demasiado tarde. Esto es repentino, lo sé, pero por favor considérelo y de su aprobación- contuve la respiración nerviosa, busqué con desesperación conectar con los ojos de Heinley que seguían mirando con súplica al sumo sacerdote.

-Sumo Sacerdote. Es claramente ilegal que el rey Heinley asista a esta corte sin permiso- el sacerdote me miró en silencio parecía preguntarme si está fue mi idea, asentí y en respuesta, busqué la mano de Heinley, la tomé con fuerza, causando que su mirada volviera a posarse sobre mí, sus tranquilizantes ojos púrpura hicieron efecto, sonreí de nuevo para él y miré fijamente al Sumo Sacerdote. El abrió la boca para hablar, sentí el pulgar de Heinley acariciar mi dedo índice para tratar de tranquilizarme más. La mirada del Sumo Sacerdote se dirigió a nuestros dedos entrelazados.

-Apruebo el nuevo matrimonio de Navier con el rey Heinley- sentí que el aire contenido escapaba. Heinley exhaló, se giró a verme con una brillante sonrisa en sus labios, sus ojos también brillaban de lo feliz que se veía, sonreí sin poder evitarlo.

-La corte de divorcio ha terminado- como recordaba el Sumo Sacerdote nos miró y pidió acercarnos. Heinley y yo intercambiamos votos matrimoniales, sin soltarnos las manos a excepción de cuando tuvimos que firmar, una vez oficial, el Sumo Sacerdote nos dio una sonrisa triste.

-Su excelencia, gracias- Heinley volvió a sonreír y se inclinó para recibir su bendición -celebraremos una ceremonia apropiada luego y lo invitaremos-.

-... Ya he dado mi aprobación, así que no hay necesidad. Estoy ocupado así que no me llames una segunda vez- dijo en tono brusco -emperatriz Navier. No, reina Navier. Aprobé esta petición porque he creído en ti desde tu infancia. Este no será un camino fácil-.

-Lo sé, pero estoy dispuesta a arriesgarme- cada vez que miraba a Heinley mi corazón se aceleraba, hoy se veía tan adorable -gracias, Sumo Sacerdote- sonreí con absoluta sinceridad.

-Organiza una gran boda e invita a muchas personas. Cuando te vayas, sal con orgullo-.

-Seguiremos su consejo. Sin duda lo invitaremos a la boda- Heinley rozó dudoso su mano con la mía, entrelacé nuestros dedos de nuevo.

-Estoy ocupado- se giró a ver a Sovieshu, quien lucía como un volcán a punto de hacer erupción. Nuestros ojos se encontraron, sus ojos brillaban con furia. Cuando el Sumo Sacerdote se hizo a un lado, él se acercó lentamente.

-Emperatriz. No, Navier. ¿Qué te pasa? Esta propuesta de matrimonio, explícamela-.

-Sé la respuesta que quieres, pero no es asunto de mi exesposo-.

-¿Exesposo?- Me miró incrédulo -¿exesposo?- Se rio agudamente -sí, exesposo. Soy tu exesposo- él miró mis dedos entrelazados con los de Heinley, se acercó peligrosamente a mí -sigo siendo tu emperador. Y no permitiré que mi exesposa se case- el Sumo Sacerdote chasqueó con desaprobación su lengua.

-Emperador Sovieshu. Esto cae bajo mi autoridad- alguno de los espectadores de tal escena, se rio. La cara de Sovieshu endureció y sus orejas enrojecieron, nos miró a Heinley y a mí, se giró saliendo furioso por una puerta lateral, siendo seguido por Rashta, el Sumo Sacerdote no tardó en salir después.

El ruido estalló en la corte. Mis padres, mis damas de compañía y el marqués Farang se acercaron.

-Navier, ¿qué está pasando?-.

-Navier, te volviste a casar repentinamente-.

-¿Qué pasó, Navier?-.

-Lamento no habérselos dicho antes- mis damas se lanzaron a abrazarme, por lo que tuve que soltar la mano de Heinley.

-No, esto es maravilloso-.

-No sabe lo gratificante que es esto-.

-¡Casi me rompo los dientes rechinándolos cuando se aprobó el divorcio!-.

Laura y la condesa Jubel pidieron ir conmigo.

-En nombre de mi esposa, gracias. Serán tratadas mejor allí, así que por favor siéntanse libres de venir con ella- sonreí al escucharlo llamarme su esposa, ante esto Laura hizo un sonido de asfixia y mis padres parpadearon aturdidos -ah. Suegra, suegro- Heinley se acercó a ellos -su hijo está en el Reino Occidental- los ojos de mis padres se abrieron de par en par sorprendidos, mi padre estalló en lágrimas y mi madre se veía aliviada.

Sentí mis ojos llenarse de lágrimas, una vez más agradecía a la vida por mandarme a Heinley, respiré hondo y me acerqué a él, cruzamos miradas, le sonreí antes de abrazarlo.

¿Creen que quedó bien el cap?

Editado: 4/02/2023.

Atte: Sana~i.