Capitulo 13

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—Es un super simio, y no te ofendas, pero no tienes poderes

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—Es un super simio, y no te ofendas, pero no tienes poderes

—O nos los has visto —dije.

Arranqué y llegué hasta la alcantarilla.
Esto me trae recuerdos de Gotham.

Avancé rápido hasta donde se oía el sonido del tren y Barry estaba en medio de las vías. Me lancé sobre él quitándolo de en medio, pero seguía sin reaccionar.

—Barry concéntrate, concéntrate en mi voz. Tenemos que derrotar a Grodd, pero no puedo hacerlo sin ti. Sé que puedes, confío en ti.

El parpadeó rápido.

—¿Helena?

—Aqui estoy. Quédate aquí.

Con suerte había traído la espada y el escudo que me regaló mi madre.

—Humana...—dijo Grodd en mi mente

—No del todo —respondí sonriendo

Su daño telepático no me hacía daño, las amazonas me habían entrenado bien hace tantos años.

Le dí varios golpes en el estómago y algunas cortadas en la pierna, aunque eso no lo detuvo.

—¡Huntress!

—¡Busca a Joe! —le grité a Barry

Él se fue y regresó unos minutos después.
Justo cuando iba a pasar el otro tren, Barry me quitó de los rieles y el tren se llevó a Grodd.

—¿Estas bien? —preguntó

Asentí.

Volvimos a los laboratorios.

—Okey —dijo Cisco con una sonrisa mientras admiraba mi espada y escudo— Esto es increíble, ¿De dónde lo conseguiste? No he visto una escritura así jamás.

—Sabes que no voy a responder eso, ¿No?

—Si, Helena, digo Huntress, digo...

—Helena esta bien, Cisco. Vamos con Barry.

—Tal vez fue bueno que no lo atraparamos —dijo Cait mientras me sentaba a lado de Barry— ¿Dónde lo pondríamos? La tubería no está equipada para tener a un gorila telepático super inteligente.

—Joe mencionó que Grodd llamó a Wells "padre". Wells debió ordenarle que nos persiguiera, por eso Grodd no asesinó a Joe —comentó Barry— Creo que Joe tiene razón, todo lo que Grodd hizo fue solo una distracción.

Volteó a ver a Cisco.

—¿Estás bien? ¿Qué tienes?

—Pensaba en la banda, no fue suficiente. Pudiste morir allá, amigo.

—No, Cisco. Si funcionó y probó que no necesitamos a Wellls.

—Es verdad, Cisco. Le eché un vistazo a la banda y es un gran trabajo.

—¿De verdad?

Asentí.

—Significa mucho viniendo de tí, gracias.

—Los cuatro vencimos a Grodd y rescatamos a Joe —continuó Barry— Juntos haremos lo que sea.

—Si bueno, supongo que esto es lo suyo, pero me están empalagando así que, tu —dije señalando a Cisco— Ven conmigo.

Salimos hasta el cortex.

—¿Cómo sería posible que alguien volviera a encender el acelerador de partículas? —pregunté

—No es posible, la tecnología quedó frita.

—¿De ninguna forma?

—De ninguna forma

—¿Podemos hablar un momento? —me pidió Barry

Salí detrás de él hasta uno de los pasillos.

—¿Qué fue... qué fue lo de la alcantarilla? Ni siquiera sabía que tenías un escudo, mucho menos una espada. Y la forma en la que heriste a Grodd...

—Barry, hay cosas que no te puedo contar. Puedo contar mis secretos, pero no los de alguien más. ¿Me entiendes?

Él asintió.

—Lo único que te puedo decir es que no soy cien por ciento humana.

Asintió y le dí un ligero golpe en el brazo.

—Buen trabajo, Flash.

—Nos vemos mañana —dijo sonriendo

Asentí.

Fuí a entrenar un par de horas y Cisco me llamó más tarde, diciendo que tenía algo importante que mostrarme.

The lightning huntress (Barry Allen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora