Capitulo 25

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Más tarde fuí a comer a un restaurante, pasé un par de horas ahí y después me fuí a los laboratorios.

Todos estaban en el cortex, incluso el detective West.

—No, no. Sigan trabajando, pensaré en otro modo para atrapar a Zoom —dijo Barry mientras salía del cortex.

Se detuvo a mi lado.

—¿Cómo te sientes?

—Mucho mejor que en la mañana, gracias.

—¿Eso significa que...

—Barry —lo llamó Joe y él se fue.

Me acerqué hasta Cisco.

—¿Qué sucedió?

—La doctora Light escapó, Jay no nos ayudará más...—respondió y se acercó un poco más a mí — Y Joe sospecha de Wells.

—Tambien yo —murmuré.

Él se fue por un pasillo y Caitlin me llamó para hacerme más pruebas.

Más tarde, Barry nos llamó a una sala donde al parecer, Linda practicaría contra Barry para hacerse pasar por la doctora Light y atrapar a Zoom.

—¿Y exactamente a quién se le ocurrió esta terrible idea? —preguntó el detective West

—Bueno no es una terrible idea...—empezó Cisco

—Si, lo es.

—El traje puede absorber el impacto —dijo.

—¿Enserio o algo? —preguntó Iris.

—¿De verdad no te parece una terrible idea, Cisco? —volvió a preguntar el detective.

—Oigan, saben qué, me gusta creer que veo el lado positivo de las cosas, ¿Si? ¡Optimismo, chicos!

Cisco colocó sus personajes de tamaño real en posiciones estratégicas, Barry y Linda caminaron hacía ellas.

—Bueno, disparale al que se parece a mi, ¿Si? —dijo Barry.

—Voy a entrenar —susurré palmeando el hombro de Cait.

Me fuí a casa, y estuve en la bati-cueva. Barry llegó un par de horas después.

—¿Cómo funciona esto? —preguntó agarrando unas almohadillas.

—Te los pones en las manos y yo te golpeo.

Hizo lo que le pedí y comencé a golpearlo suavemente.

—¿Normalmente golpeas así?

—No

Hubo un rato de silencio.

—Oye, ¿Crees que podamos ir a cenar esta noche?

—¿Te refieres a después de que atrapemos a Zoom?

—Si, claro.

Comencé a golpearlo más fuerte hasta que dí un último golpe.

—Auch

—Lo siento

—No dijiste que sí —me recordó

—Barry, tenemos cosas más importantes que hacer.

—Siempre es así —dijo acercándose un poco más a mi

—¿Por qué haces esto? —pregunté apartandome y miré la hora— Hora de tu magnífico plan.

Suspiró y se puso su traje.

—¿Te llevo?

—Aunque diga que no, igual lo harás

The lightning huntress (Barry Allen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora