Deku el villano sin opciones

Un sueño que ya no es solo un sueño

Melissa Shield fue concebida en el seno de un matrimonio felíz, ambos, tanto el marido como la mujer, habían anhelado ser padres eh hicieron todos los preparativos necesarios para que esto ocurriera sin ningún contratiempo, y finalmente el tan esperado día llegó.

Al ver a la pequeña, ambos padres sintieron una felicidad inmensa, la niña poseía los mismos rasgos de su madre, y el padre solo la amo aún más por eso, en ese sentido la vida de esa niña era la vida ideal.

A la tierna edad de 3 años sin embargo, la vida de la pequeña Melissa se vería sacudida por la tragedia, su madre sufrió un accidente automovilístico que terminó con su vida, una muerte tan rápida que podría decirse que fue indolora, aún así, para la pequeña Melissa está perdida no afectaría su desarrollo físico o emocional, pues su padre aún estaba allí, y el amor que este sentía por su pequeña era el suficiente como para llenar el vacío.

A la edad de 4 años, otro incidente ocurriría, la pequeña fue diagnosticada como Quirkless, ella no entendía el significado de esto, sin embargo, por la expresión que tenía el doctor entendió que esto no era algo bueno.

Aún así, su padre estuvo allí para ella, explicándole el significado de dichas palabras y el como eso no significaba nada, ya que almenos su quirk era inútil, aunque nunca llegó a mencionar el quirk de su madre.

La educación preescolar y primaria resultó ser difícil para la pequeña Melissa, sus compañeros eran amables con ella, pero había cosas que no podía hacer, al igual que todos los niños de esa edad, Melissa deseaba ser una heroína, ser como su tío Might, y traer esperanza y sonrisas a todos, pero ese era un sueño imposible para ella y lo sabía, por lo que a una tierna edad decidió dejar de lado sus sueños y dedicarse a algo más acordé a sus capacidades.

Resultó ser, que la jovencita heredó los rasgos físicos de su madre pero el talento y intelecto de su padre, y a temprana edad empezó a trabajar en sus propios diseños, era satisfactorio saber que sus esfuerzos podrían ayudar a los héroes a salvar vidas, sin embargo en secreto, ella observaba videos de héroes en rescates o patrullando, convenciendose a si misma de que lo había para pensar en nuevos inventos, pero sin poder evitar imaginarse con su propio traje.

Con el tiempo, termino dejando todo atrás, aquel mundo del cual no podía formar parte, dejando tras de si a aquellas aquellas personas "amables" que la trataban como si fuese de cristal, y continuando su educación en Island, dónde puliria sus habilidades y dejaría su huella en el mundo.

Todo cambio para ella cuando su querido tío llegó de visita, verlo nuevamente, fue para Melissa el equivalente a volver a la escuela primaria, rememorar aquel sueño infantil de ser una heroína, solo que ya no sería más un mero sueño, ahora podía volverse una realidad.

Melissa aprovecho todos los recursos disponibles en Island y completo su entrenamiento, logro matricularse a U.A, la escuela que formó a su más grande héroe, finalmente el mundo en el que vivía le había dado la bienvenida, no había día que pasará sin que ella se sintiera completamente plena.

Así transcurrio el día a día para Melissa Shield, sin embargo esto cambio cuando conoció a sus mas grandes pesadillas, aquel que amenazaba con quitarle su lugar en el mundo, y aquel que amenazaba con borrar su existencia.

En ese chico, Melissa se vio reflejada en más de una ocasión, para ella, ese pudo haber sido su destino, por más que se negara a aceptarlo, la idea seguía allí y tarde o temprano tendría que ha era frente a eso.

Ella quería sentirse parte del mundo que la rodeaba y fueron los héroes quienes le dieron ese lugar, mientras que habían sido los villanos quienes le habían dado a el su lugar.

Las palabras del gran villano frente a ella, el rey de los demonios eran correctas, ella estaba aferrada al One for All, pero también estaba aferrada al deseo de ser una heroína, y mientras estuviera viva, jamás dejaria que un mal tan absoluto como ese ganará ese era su voluntad como la novena portadora y como la heroína Kibou.

"No estoy deacuerdo con tus métodos, considero que eres un monstruo y definitavente te detendré, pero almenos ahora entiendo un poco tu deseo de formar parte de este mundo" pensó Melissa usando sus látigos negros para atar al villano y usar el don del segundo, alteración de velocidad- para alcanzar una rapidez abismal y golpear con la fuerza del 100% del One for All.

-sin importar lo que digas, yo seré un heroína y todos nosotros vamos a vencerte- declaró Melissa tomándose un momento para reponerse, debido a lo agresivo del movimiento.

-¡JAJAJAJAJA! Enserio lo hiciste, que tan tonta puedes llegar a ser, es cierto que ese golpe fue muy fuerte, incluso con estás porquerías el daño fue inmenso, pero incluso con todos esos quirk a tu disposición, no has llegado al nivel de All Might, tu cuerpo no puede soportarlo o si-.

-has lanzado golpe, tras golpe, tras golpe, todos muy potentes, pero siquiera te has tomado el tiempo de ver tus brazos- señaló el villano burlonamente, forzandolo a ella a mirar.

Observando el estado actual de los guantes que Hatsume Mei había echo para ella.

-las emociones de Shigaraki son poderosas, sin ellas no habría podido llegar tan lejos, pero aún así no soy tan miope, como para apostar todo en una sola carta- declaró el villano mofandose de la portadora y de los héroes quienes observaban atónitos como el villano se levantaba.

Pese a estar golpeado y herido, Shigaraki se movió a toda velocidad con si fuese una bestia salvaje, intentando atrapar a Melissa con sus múltiples y grotescas manos, está a causa del Shock no logro reaccionar a tiempo, fue gracias a Nejire que pudo evitar el ataque.

Sin embargo esto la dejo en una posición comprometida, intentando esquivar los dedos que crecian uno tras otro.

La agilidad de esta era enorme, pero las heridas causadas por el ataque de Dabi en Jakku habían dañado su rostro y con ello su ojo, impidiéndole reaccionar a tiempo al torrente de dedos que terminó estampandola contra el piso de la plataforma.

-ves lo que pasa cuando no te concentras en lo que haces novena- bromeó el villano, sacando de sus casillas a todos los presentes.

Fin del capítulo 168, espero que les haya gustado, si es así, comenten y recomienden para que está historia pueda llegar a más personas.