Hermione Grindelwald - Tears of Magic Blood

Capítulo 02: La Huída de los Potter

La escolta de los Potter salió de la casa, Lily se le quedó viendo un rato mientras la gente salía de ella, como si hubiera algo que anhelara sobre aquel lugar. Eileen salió casi de ultima, podía distinguir ligeramente como la barrera que habían formado alrededor de las casas y una buena parte de la calle, donde se encontraban media docena de caballos negros, alados y huesudos.

Harry fue el último en salir, cerrando la puerta de la casa detrás de él. Llevaba a Hedwig en el brazo, quien se acariciaba suavemente contra su rostro. La lechuza blanca, compañera de muchos años del chico, se acercó a su rostro y le mordió muy sutilmente el puente de su nariz. Al chico no le dolió, no lo hizo con fuerza, de hecho, pareció hacerle algo de cosquillas. Con una suave caricia por parte del chico, la lechuza abrió sus blancas alas y emprendió el vuelo, perdiéndose en la negra noche.

Poco a poco, la escolta comenzó a separarse en grupos. Lily tomó la punta, con Fred y George a sus lados, los tres en escobas. Erika iba justo detrás de Lily, con su cabello negro atado a una cola de caballo, sus acompañantes; Hydri y Nashira, se encontraban detrás de los gemelos. Hydri incluso se había puesto unos guantes de cuero negro para sujetar mejor su escoba. James iba detrás, con Susan y Hannah subidas en una sola escoba, parecía que la chica (anteriormente) pelirroja tenía dificultad para sostenerse de la escoba, por lo que abrazaba con fuerza a Hannah, quien parecía tener mejor control.

Hagrid, subido en la gran motocicleta de Sirius, que parecía haber sido modificada especialmente para él, removió el sidecar de la derecha para poderse subir, y cuando lo volvió a introducir, Eileen y Harry se sentaron en los asientos que les correspondían. Fleur y Malicus estaban justo detrás, en paralelo con Bill y Gabrielle, montadas en un Thestral ambas parejas. Kingsley y Nicoletta estaban detrás de las graduadas de Beauxbatons, con Sirius y Odyne a su lado.

La formación cerraba con las escobas de Remus con Pictoris delante manejando la escoba, Nox con Lynxi de la misma forma, Sandrine y Tonks en otra, Luna y Arthur se encontraban con un Thestral bastante viejo (Harry lo reconoció un poco de su Quinto año). Rashel y Ciara cerraba la formación en la punta. Mundungus estaba fuera de esta, pero subido en su escoba, con la escoba de Ojoloco a la mano, Cámula se encontraba ya en posición, preparada para noquear a Dolohov y Rowle.

Ojoloco se posicionó hasta el frente, resonando su bastón en la fría avenida.

― ¡Todos conocen sus puntos de encuentro! – dijo Ojoloco, con fuerza. – ¡Todos a la Madriguera, nos reuniremos ahí en una hora! ¡A la cuenta de tres!

― ¡Sosténganse, niños! – dijo Hagrid, dando una fuerte patada. La Motocicleta resonó con violencia.

Eileen y Harry se sostuvieron del vidrio de su propio sidecar, llevaban la varita ya en la mano, con Eileen sosteniendo su varita son empuñadura con mucha fuerza. Ojoloco gritó "¡Uno!", y los caballos comenzaron a relinchar suavemente, comenzando a extender sus alas. "¡Dos!" volvió a gritar Moody. Lily giró suavemente su rostro en dirección a sus hijos. Sabía que estarían bien, sabía que estaban en buenas manos... pero en su rostro su preocupación era posiblemente la más visible de todos los que se encontraban en la escolta.

Un violento destello rojo resplandeció al final de la calle, y unos gritos de varones sonaron, inmediatamente seguidos por un sonido sordo como si algo cayera al suelo.

― ¡Tres! – Gritó Moody, golpeando su bastón contra el suelo.

Las escobas silbaron cuando se lanzaron en el aire, pasando por los lados y por encima de Ojoloco. La motocicleta resonó con furia mientras comenzó a avanzar con rapidez por la calle de Privet Drive, y se elevó rápidamente en el aire, pasando a un par de metros por encima de la cabeza de Ojoloco. Los Thestrals los siguieron muy de cerca, el galopeo de sus pezuñas negras resonaron en el asfalto hasta elevarse en un fuerte golpe con sus alas.