- La Tercera Parte de la Saga de la Niña que Vivió. -
La Historia de Lady Grindelwald pronto llegará a su fin.
Dumbledore a muerto, y el mundo mágico se ha quedado sin uno de sus mayores defensores.
Los seguidores del señor tenebroso se vuelven cad...
Luna por fin soltó a Daphne, permitiendo que la rubia de ojos de color ámbar se lanzara hacia Hermione, besándola tiernamente antes de abrazarla con mucha fuerza. La chica de cabello rubio ondulado llevaba una chaqueta negra de manga larga y una blusa de tirantes de color gris, junto con unos shorts de color negro y unas botas oscuras. Su collar de piedra resaltaba especialmente en el escote de su pecho.
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― Chicos, estoy tan feliz de ver que están bien. – dijo Daphne, abrazando a Eileen, dándole fuertes palmadas.
― ¿Cómo has estado, Daphne? – dijo Harry cuando la chica llegó a él para abrazarlo, soltando esta un fuerte suspiro de alivio.
― Podría estar mejor, Harry. – dijo la chica, y le puso su mano sobre la barbilla, acariciando suavemente el vello creciente en su mentón. – Te queda bien la barba de media tarde. Ginny no mentía cuando decía que te veías guapo con barba.
― Uy, eso que no lo viste sin rasurarse. – dijo Eileen, riéndose mientras transformaba su rostro en el de Harry, con una barba oscura cubriendo buena parte de su rostro.
― ¡Ja! Espera a que Ginny lo vea. – dijo Daphne, sonriente.
― ¡¿Ginny está aquí?! – preguntó Harry, sobresaltándose.
― No, no, calma, descuida. – la chica lo tranquilizó, dándole palmadas sobre su pecho. – Ella no está aquí... aún no. ¡Ah, Hola! – dijo Daphne, viendo a Aberforth entrar de nuevo en la habitación. – Es posible que vengan algunas personas más.
― ¿Qué quieres decir, Greengrass? Tenemos toque de queda. – dijo el hombre, volviendo a su faceta gruñona, pero Hermione pudo notar que tenía los ojos ligeramente enrojecidos.
― Por eso se aparecerán en el bar. – señaló Daphne, apartándose un poco y caminando de vuelta al pasadizo del retrato de Ariana. – Cuando lleguen, por favor envíalos por aquí.
Daphne sacó su varita y levantó la alfombra roja y vieja que había bajo sus pies. Esta se levantó y formó una escalera que llevó hasta el pasadizo de piedra detrás del retrato. Luna fue ayudada por Daphne a subir hasta el pasadizo, y luego hizo lo mismo con Hermione, Harry y Eileen, antes de despedirse amablemente de Aberforth y caminar por el corredor oscuro, iluminándolo con su varita, mientras la "puerta" detrás de ellos se cerró.
― Nunca vi esto en el mapa del merodeador. – dijo Harry, iluminando su varita al igual que Hermione y Daphne.
― Es por que no existió hasta ahora. – dijo Daphne, liderando el camino. – Los Siete Pasadizos fueron sellados a principios de año. Esta es la única entrada y salida.
― Supongo que los mortífagos y Dementores están esperando a cada salida, por que de por si había pasadizos que estaban derrumbados. – dijo Hermione, recordando la explicación que recibió de los hermanos Weasley
