"El tiempo y el aire son iguales, sabemos que estan aquí pero nunca los vemos"
"Con mantas de oscuridad, coronas de espinas y ojos brillantes, los dioses siguen aquí; entre sus castillos de piedra y bestias horrendas, ellos esperan el momento de vol...
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El barco era más pequeño y veloz, mantuve mi palabra de mantenerme en la cubierta, debes en cuando tomaba comida que prometía devolver cuando tuviera dinero, era claro que muchos pasaban de mí. Aunque tenía calor, mantenía mi capa y la capucha sobre mí, pude ver a la distancia, las costas anaranjadas del otoño, los colores eran parecidos a los del fuego de aquí, luego fue el turno del invierno, sus costas brillaban blancas por la nieve, veía páramos olvidados, las casas eran lo que sobresalía. Note cómo la magia se volvió más densa y fuerte, casi aquí ya podía ver como brillaba con más fuerza alrededor de casi todos en el barco, incluso creía ver estrellas durante la noche. Cuando cruzábamos lo que eran aguas del medio, escuche a mí poder vibrar, querer ir hacia aquella costa y adentrarse, a la lejanía podía ver la playa gris, había un aire amenazador, incluso hicieron que fuéramos más rápido, alejándonos con miedo, tal vez en algún momento podría ir.
El viaje terminó en el puerto del amanecer, a la lejanía el sol se alzaba incendiando el cielo, realmente estos amaneceres eran únicos en el mundo. Encuentre mucha vida aquí, me recordó al puerto al sur, hileras de barcos y ruido llenaban el lugar, cuando el barco atraco, baje ayudando a alguien a cargar unas cosas, me llevaron hasta una fila larga, vi algunas hadas anotando algo en cuadernos forrados de cuero, cuando fue mi turno, me preguntaron mi nombre, solo lo dije "Calisto Enid" me dieron un papel, luego me perdí entre el mar de gente, había tanta gente de diferentes lugares. Era caótico, aquí había tantos faes, era extrañar ver con todos estaban sumidos en sus trabajos, me metí entre calles alejándome del ruido, cuanto más avanzaba podía ver una construcción a lo lejos, un castillo de cúpulas redondas y brillantes como el oro, me quede quieta viendo aquella construcción magnífica.
Luego continúe, me senté en un banco en la calle. El suelo era de una piedra blanca y brillante, las casas eran de dos pisos o más y algunos techos eran como los de Xian, alargados con puntas hacia arriba. Ahora... Tendría que conseguir un trabajo, luego comida y por último una casa, pero antes de todo eso, podría ir a pescar en algún río. Caminé por un tiempo hasta que me di cuenta de que los bosques que están cercanos a las costas eran pequeños y que los ríos aquí eran pocos y no tan profundos. Me quedé sin comer pescado esta vez.
Regrese sobre mis pasos. Decidí buscar un tablón, al encontrar uno, estaba repleto de distintos anuncios. Algunos hablaban sobre tener cuidado al viajar al este, otros sobre algunos lugares donde poder descansar por un tiempo, luego información para el reclutamiento tanto de hembras y machos para el ejército, encontré otro anuncio para trabajar en la agricultura, otro sobre gestionar documentos en una ciudad dentro de la corte, luego algo me llamó la atención, al ver detrás de la hoja, encontré un mapa de la ciudad, así que solo me deje guiar. Termine delante de una casa dorada y rosa creo, había una campana sobre el arco de la entrada, el sonido fue pequeño, pero lo suficiente para escuchar a alguien caminar dentro de la casa, una hembra de piel verdosa y cabello esponjado del mismo tono, abrió la puerta.
