"El tiempo y el aire son iguales, sabemos que estan aquí pero nunca los vemos"
"Con mantas de oscuridad, coronas de espinas y ojos brillantes, los dioses siguen aquí; entre sus castillos de piedra y bestias horrendas, ellos esperan el momento de vol...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Helion intentaba convencerme de no hacer nada estúpido
De no ir a Tamlin o Beron.
De alguna forma bloqueé aquel lazo.
Bajé de Nublar, mis pisadas eran ruidosas sobre el camino de grava, el centinela me observaba con asco, pase como si nada a la nueva mansión, de alguna forma el espacio parecía un laberinto con nuevas puertas y espinas con cuadros.
Abrí una puerta encontrando a Tamlin.
—¿Qué haces aquí?
Mis latidos taparon mis oídos. No lo hagas, gritaban mis nervios, mi corazón.
—¿Por qué?
—¿De qué hablas? —dejó una daga sobre su escritorio.
—¿Por qué intentas hacer a Lucien general?
—Eso solo le corresponde a él y-
Sin más le solté.
—Me necesitas a mi
Mariel nunca se equivocó, después de todo, ella fue la única voz que escuche hace tanto tiempo.
Sus ojos esmeraldas no centellearon, estuvieron fijos en mí, completamente atento a mis gestos, escuchando, seguramente, mis latidos.
Di un paso más, como si una fuerza extraña me alentará a continuar.
—Me necesitas
—¿Y qué sabes sobre cortes? —pregunto seco— ¿Sobre gobernar o si quiera guiar?
Nada. Muy poco en realidad...
—Hay libros que-
—No todo está en libros —dio un paso más, con los hombros tensos y las manos a sus lados comenzando a mostrar las garras.
Una advertencia.
—No conoces nada de esta corte, no sabes las costumbres que siguen guiándola. No sabes absolutamente nada
Controlé mis emociones, sostuve su mirada, no agache la mirada. Relaje mi respiración.
—No, pero no siempre tienes oportunidades como esta, tenerme a tu lado, te beneficiara...a ambos.
—No me interesa tenerte cerca, sé lo que hiciste en el norte, en la corte de Thesan, además ¿tu amante te permitirá estar aquí?
—Él no es mi amante —solté entre dientes —no tiene nada que ver con las decisiones que tome, y si ¿Tu por que crees que Thesan me permitía estar en su tierra?
—¿Te estás ofreciendo como un objeto?
—Necesitas un aliado —solté entre dientes. Sentía hilos manejándome.