ℂ 𝕒 𝕡 í 𝕥 𝕦 𝕝 𝕠 𝟙𝟘𝟙

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El agua se agitó por el pez intentando escapar de su muerte.

Le quité el gancho, aguardando en el saco, junto a los otros.

La mañana era fría, el deshielo ya había comenzado.

Tire de la cuerda de pescar para ver como un pez escurridizo se salvaba.

—Bueno...solo uno más —volví a lanzar el anzuelo, sentándome entre la nieve.

Tome uno de los trocitos de carne seca masticándolo con cuidado.

—Creo que ese volverá a caer —la boca se me seca. La nieve a mi alrededor se fue. Sentí una capa cubrir con cuidado.

Se sentó con gracia a mi lado, estirando una de sus piernas y la otra doblada con el brazo descansando ahí.

—Mucho tiempo, Ena —tome aire volviendo la vista al rostro brillante de Helion.

—Vassa dijo que no te quería ver por aquí —levanto los hombros y sonrió un poco.

—No creo que le moleste —sus ojos se movieron con cuidado sobre mi, incluso sentía que estaba bien más allá de la ropa, directamente a mi piel. —He escuchado tus aventuras en el mar

—No te envíe ninguna carta

—Estaba aquí cuando Jurian leyó la primera que enviaste —negué suspirando. La cuerda se tensó, jale con fuerza. —parece que estás brillando Ena

—Es el blanco de la nieve —jale de nuevo— refleja los rayos del sol

—No creo que sea solo eso, ¿Por que te fuiste? —la cuerda se rompió y me fui hacia atrás cayendo en la nieve.

—¿Estás bien?

—¡Ese maldito pescado! —me levante con la mano abierta, la esfera oscura se formo ahí, el agua salió impulsada hacia arriba, los lazos negros entraron en el liquido atravesando al pescado con el anzuelo en la boca, cayo en el saco.

Toda el agua volvió al río como si no hubiera sucedido nada.

Los ojos de Helion brillaron igual que la sonrisa de su boca.

—¿Qué?

—Nada, tu método se volvió más limpio que antes

—¿Y cuál era el de antes?

—Bueno, el río se hubiera secado y hubieras bajado ahí para agarrar tu misma el pez

—Mejore... —Cerré el saco, y dejé la caña para pescar.

—Espera —se interpuso en mi camino, había casi olvidado que tan imponente era. —quiero hablar contigo

—No tengo tiempo —pase de él, devolviéndole su capa.

La Diosa De La Oscuridad ✴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora