Prisionero [Omegaverse]

Capítulo 58

En una mansión escondida en lo más profundo de la secta Qinghe Nie.

Nie MingJue fue a visitar a Jin GuangYao durante la noche. Al entrar a la mansión, recibió el reporte de los siervos primero como de costumbre y más tarde entró a la habitación de su omega.

Esta vez los reportes no eran nada buenos y planeaba corroborar la información.

—¿Meng Yao?

Cuando miró a Jin GuangYao en la cama, pudo notar sin mucho esfuerzo que lucía demasiado débil. Tan cansado que no importaba cuánto tiempo durmiera, estaba cubierto de ojeras oscuras bajo sus ojos y la tez en su rostro era muy pálida.

Según el informe de sus siervos, cada día Jin GuangYao comía menos y también se negaba a dejar la cama. Con mucho esfuerzo y gracias a la ayuda de los siervos es que puede mantenerse aseado y hacer sus necesidades básicas pero en su estado de embarazo, eso no era una señal nada buena.

Nie MingJue no era tonto y sus siervos fueron claros en el informe y en que sobretodo Jin GuangYao debería ver un médico cuanto antes o de lo contrario no mejoraría.

—Meng Yao.

Nie MingJue se acercó a la cama y acarició el rostro de Jin GuangYao. Solo después de ese breve contacto el Omega abrió los ojos un poco.

—Dage. Dage, te extrañé.

Nie MingJue besó a Jin GuangYao en los labios y este cerró los ojos apenas pudiendo corresponder. 

—También te eché de menos. ¿Cómo estás?

—Me siento débil, dage. Cada día siento que es más difícil despertar.

Nie MingJue acarició el enorme vientre de Jin GuangYao. Se sentía en una encrucijada. Aunque sabía que la situación era su culpa, no sentía arrepentimos.

Esto era lo que deseaba. Un Meng Yao cariñoso y dispuesto que llevara a su descendencia. Nada más que eso.

¿Entonces por qué se sentía tan culpable?

A pesar de que se juró mantener a Jin GuangYao aislado del mundo y evitar cualquier contacto con otras personas del exterior, al final su preocupación pudo más y mandaría a llamar a un médico de las afueras del mundo de la cultivación, alguien preferentemente fuera un experto y no conocía la situación de las grandes sectas.

Nie MingJue habló con Meng Yao un poco más hasta que al final el Omega volvió a quedarse dormido así que salió de la habitación.

A raíz de verlo en tal estado de debilidad, decidió convocar a uno de sus guardias secretos y que le ordenó que buscara a alguien que cumpliera sus condiciones de confidencialidad y por sobretodo, que fuera un experto en medicina.

Así fue como el experto en medicina llegó a la residencia Nie después de tres días. Se trataba de un anciano errante que solo trabajaba por una gran cantidad de dinero, sin importarle qué tuviera que hacer.

Este médico es un alfa, alguien que desde su contratación no se había perturbado con nada ni con nadie. Sin embargo, cuando llegó a la mansión Nie inmediatamente sintió escalofríos por todo su cuerpo. Y aquella sensación incomoda se volvió incluso peor cuando cruzó el umbral de la puerta y entró a la habitación oscura donde descansaba Jin GuangYao.

Casi de inmediato sufrió una aplastante supresión por el aura de un alfa dominante. Sus instintos primitivos de alfa le dijeron que corriera de inmediato y huyera pero el guardia tras él se lo impidió y lo miró con una expresión asesina.

—Entra. —le ordenó aquel alfa.

Después de dar esa orden, el médico prácticamente fue lanzado a la habitación oscura y se sintió totalmente cohibido por la supresión. En el interior de la alcoba solo habían dos velas encendidas cerca de la cama, y en ella distinguió que estaba durmiendo un hombre.