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El celular de Seokmin estaba roto. No, no roto, destrozado, la pantalla agrietada era lo de menos cuando apenas se veía una línea de luz, y no había sido culpa de Seokmin, había sido culpa de Joshua por escoger un segundo piso visible, no había una pared, solo una simple baranda de vidrio que los separaba de caer ¿y que tal si no hubiera sido su celular? ¿Qué tal si hubiera sido él? O Kakku o Mark, tenía que discutir seriamente con Joshua acerca de esto... cuando se dejara de burlar de él.

—¿estás molesto porque tu celular no es trapecista?— Preguntó Joshua aun sonriéndole desde el sillón con su laptop en sus piernas. —Ya déjalo, cómprate otro.

—No soy un consumista sin corazón que no le impo...

—Te comprare uno yo.

—¡Gracias!

Seokmin sonrió de oreja a oreja ignorando la vuelta que hicieron las pupilas de Shua. Bien, no era tan malo si alguien culpable de romper su celular lo pagaba por él, Seokmin estaba en su derecho de aceptar que remediara el daño.

Se lanzó a lado de Joshua y se deslizó entre los cojines observando la pantalla con letras y números, era aburrido, Seokmin no era bueno con lo teórico, no era bueno escribiendo o analizando las cosas, era mucho mejor haciéndolas, como cocinar o cantar, donde podía usar las manos o su voz y no tanto su cabeza.

Bien, Seokmin prefería usar sus manos que su cabeza, pero solo porque era mucho más entretenido hacer eso que pensar. No era como Joshua que solía pensar demasiado, pero tampoco era como Hoshi que no pensaba absolutamente nada. Era un buen intermedio.

—¿en que piensas?— Preguntó Joshua.

—Yo no pienso.— Joshua exhaló una risa y Seokmin suspiró. Bien, si estaba pensando. Y si pensaba demasiado... —Me llegó una invitación.

—¿para que?

—Para una fiesta.

—¿de que?

—De cumpleaños.

Joshua giró a mirarlo un poco inclinando su cabeza.

—No sueles dejarme dar tantas vueltas.— Extendió los brazos y dejó la computadora al otro lado girándose para darle su atención a Seokmin quien se encogió de hombros. —No es de Hoshi porque fue el mes pasado y no es de Woozi porque es en noviembre. Entonces... ¿Minghao?

—¿Quién es Minghao?

—Eisa.

—Ah... ¿se llama Minghao?— Joshua comenzó a negar con una pequeña sonrisa, quizás divertido de que Seokmin constantemente olvidara el nombre de Eisa.

—No, no es Minghao, de ser Minghao lo habría sabido... Entonces... ¿Wonwoo?

—A Wonwoo no le gustan las fiestas.

Joshua se dejó caer entre los cojines como Seokmin y comenzó a pensar. Y Seokmin lo imitó. Podría estar un poco indeciso de si ir o no, podría ser un no por obvias razones, o podría ser un si por razones menos obvias; la única razón era que estaban invitándolo, como si lo consideraran aun y Seokmin no quería ser grosero.

O quizás quería ir, o quizás no.

Hace un dos años se habría negado por completo, hace un año y medio se habría negado a pensarlo. Hace un año tendría una pequeña duda. Y hace seis meses... quizás. Ahora...

—Es de... ¿los antiguos amigos?

Y Seokmin asintió.

—Es cumpleaños de Suha.

—Oh... ¿quieres ir?

—No lo sé. No se si irán ellos, y aun si van no debería importarme, despues de todo Suha es quien quiere verme allí.

—Si, pero probablemente los verás.

—¿y? Ya no me importa, deje a Mingyu hace dos años. No voy a ser su amigo nuevamente, pero... Creo que me gustaría escuchar lo que Suha quiera decirme. Por algo me invitó ¿cierto?

Joshua se encogió de hombros sin apartar la mirada de Seokmin.

Seokmin hizo una mueca y se lanzó sobre el estomago de Joshua.

—No te vuelves más ligero.— Se quejó.

—Entonces vuélvete más fuerte ¿para que vas al gimnasio todos los días? En mi se ven los cambios.

—Fanfarrón.

—Caricatura.

—Touche.


Breathe [Seoksoo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora