Entre Dos Chicos

Capitulo 3

JANE'S POV

Decirle a tu amiga que tu hermano es gay no es para nada fácil, y como es Sophia, no me cree,  ella pensaba que yo estaba jugando pero obviamente no jugaría con algo así.

—¡Pero, es demasiado Sexy! Con ese cabello castaño y ojos azules—Dijo Sophia queriéndose arrancar el cabello de la desesperación.

—Así es la vida—Me encogí en hombros.

—A ver idiota, ¿Que harías si yo te dijera que Erick es gay?—Dijo Sophia y solté una carcajada—Se que te tirarías del octavo piso de un edificio.

—Del ultimo—Aclare.

—¿Oye y si ordenamos una pizza?—Dijo Sophia dándome el celular con cara seductora y cambiando el tema inmediatamente.

—Nunca se te va a quitar lo tragona ¿Verdad?—Negó con la cabeza mientras yo marcaba el numero de las pizzas—Hola—Dije cuando alguien tomó la llamada.

"Caqui-Pizzas, ¿Desea ordenar algo?"—Dijo el chico que atendía por el otro lado de la línea.

—Si, una pizza extra grande de peperoni y queso extra, por favor—Dije.

"¿Su dirección?"

—Colonia San Benito Juarez Numero 123456—Dije.

"Llegara en 30 minutos."—Colgué la llamada después de decir un "gracias" y  me dispuse a tomar el marcador negro para remarcar las letras del trabajo que yo y Sophia estábamos haciendo.

(...)

—Ya paso mucho tiempo, háblale de nuevo—Dijo Sophia renegando por milésima vez.

—Apenas han pasado 20 minutos—Rodé los ojos.

—¡Pues no importa! Pregúntale para ver si ya va a estar la maldita pizza.—Dijo haciendo un puchero y yo tome el celular para marcar el numero de las pizzas. De nuevo.

—Hola, solo quería volver a escuchar tu voz de nuevo.—Dije.

"Señorita, ya no este chingando, es la 5ta vez que me habla, ya le dije que vamos en 30 minutos, mas bien en 10, así que cállese"—Dijo el de las pizzas algo frustrado.

—Idiota—Iba a colgar la llamada—Espero que algún día aprenda a ser mas educado—Colgué.

Varios minutos después el timbre de la puerta sonó y Sophia no espero nada para pararse y abrir la puerta de golpe, cuando se encontró con el repartidor casi se lo come a besos.

—Gracias—Tomo la pizza y cerro la puerta en la cara del hombre.

—¿Le pagaste al menos, babosa?—Dije corriendo hacia la puerta, cuando gire la perilla para abrirla me encontré con el repartidor de pizzas algo frustrado por el hecho de que Sophia le haya cerrado la puerta en la cara—Lo siento, tiene retraso mental—Dije mientras le daba el dinero y le veía marcharse.

BRAYAN'S POV

La abuela Martita ya se había ido a su casa, mas bien ya se la habían llevado, lo cual era un gran alivio para mi, pero hoy tenia planeado algo especial para Jane, estoy seguro que con esto será mi novia, la llevare a tragar a un restaurante muy lujoso, me tarde casi un año ahorrando para esto, pero no importa, por ella todo vale la pena.

Tome las llaves de mi auto para dirigirme a la casa de Jane aprovechando que sus papas no estaban, ella estará sola.
Cuando llegue, me estacione afuera y me baje del coche para entrar a su casa, toque el timbre y salió ella de inmediato, con unas pijamas y una rebanada de pizza en la mano.

—Hola, ¿Estas ocupada?—Le mostré una sonrisa.

—No, pasa—Me dijo y pasamos hasta su cuarto, y ahí estaba Sophia, arruinando el momento.

—Hola, Brayan—Me saludo con la mano y yo correspondí.

—Hola—Dije seco—Oye Jane, te iba a invitar a comer mañana, es decir, ¿Sí puedes, cierto?

—Claro que puedo, ¿A que horas?.

—Yo también quiero ir—Dijo Sophia levantándose de la cama y yo fruncí el ceño, esta chica no sabia respetar la privacidad que los demás querían.

—Es que... —Pensé en una excusa—Solo guarde lugar para dos personas—Dije.

—No importa, en una silla cabemos yo y Jane.—Dijo muy alegre.

Mierda.

—Es un restaurante elegante—Dije resaltando la palabra "Elegante"—Por lo tanto, no nos permitirán hacer eso.

—Pues en el piso—Dijo.

—Lo siento Sophia, no creo que puedas ir—Dijo Jane, por fin.

—¡Ugh, de acuerdo!—Dijo Sophia sentándose en el suelo para seguir haciendo el proyecto.

—Bueno, adiós linda, cuídate mucho, que tengas dulces sueños ya sabes que te quiero demasiado y siempre estaré ahí para lo que necesites—Dije con una sonrisa.

—Si, wey—Dijo sentándose al lado de Sophia y yo borre mi sonrisa.

—Okay, adiós—Dije mientras salía por la puerta, algo feliz porque había aceptado mi invitación.