Perspectiva de Kaori.
Ya pasaron 5 o 6 años que naci de la magia de mi creador el Platinum dragón lord.
Si, además de los señores elementales soy la quinta que se su título completo.
Pero el caso es que me acuerdo perfectamente como el estaba en el momento en que naci.
De como parecía un zombie a como me abandono pese a que lo cuide con la excusa de que yo tenía que probar la libertad.
En ese momento creía que era una orden pero después me di cuenta que solo quería que yo probará la libertad sin ninguna intervención suya.
Además de que no quería a nadie que lo acompañará en ese momento.
Por lo que sin quejas decidí seguir su orden aún que tenía mis dudas.
Un año después trate de vivir de libertad que me dió en una ciudad.
Conseguí casa,trabajo de actor y fue fácil engañar a los que me quisieron engañar.
Pese a todo termine siguiendo el rastro de Akihiro.
Se puede decir que la libertad perdió todo interés de mi parte muy rápido.
O como diría Akihiro, la ilusión de libertad paso olímpicamente rápido.
Llegar a casa despues de un día de trabajo, pensar que hacer y luego quedarse en blanco, era mi día a día.
Por lo que un día pensé "si tenía la libertad de hacer lo que quiera ¿porque no seguirlo?"
Con eso vendí mi casa, renuncie a mi trabajo y empecé a seguir los rastros de Akihiro.
Esa vez estaba en conflicto, ya que literalmente estaba desobedeciendo la orden de vivir libre, pero estaba usando mi libertad para volver a el.
Cómo me dijo después, para mi especie soy más rara que paciencia de profesor mecha corta.
Pero eso terminó cuando fui descubierta por unos ángeles que estaban encubiertos.
Y En un bosque me encontré con el idiota que me molestaba hasta hace poco.
...:buenas señorita Noint ¿está perdida?- dijo con un tono relajado.
Al verlo lo primero que note es que era un idiota con poder que no es suyo.
Creo que era un item que llamaban sacred gear pero no estaba segura.
....: porque tan callada, a cierto no me presenté- dijo disculpándose.
...:soy Dulio gesualdo.
Pese a que se presentó no me sentía obligada a hacerlo.
Aún que sea por modales no tenía la obligación de hacerlo.