Multiple One Shot: ¿y si hubiera sido así? pt.5

2.4K 182 9
                                    

Rachel.

Me dejó caer sobre el torso desnudo de mi marido, la respiración la tengo acelerada, pero más que relajada, beso sus labios, con el aún dentro de mí.

—Debes dejarme tomar un descanso, lo tengo merecido —jadeo.

Se me burla en la cara.

—Merecido o no, sabes que no lo vas a tener —me muerde. Me obliga a dar la vuelta, ahora el está sobre mi.

—A este paso, voy a volver a quedar embarazada y esta vez si de dieztillizos —le reprocho.

—¿No dijiste que era imposible, nena?

Suelto un suspiro exagerado.

—Pues es imposible, pero llevamos aquí desde la tarde... Y ya es más de media noche —y en ningún momento me ha dado descanso—, así que no me sorprendería que llegue a pasar. Y si pasa, te voy a hacer cuidarlos a todos. Incluyendo a los mellizos.

Bufa. Siento que está reponiendo energías, pero yo ya no puedo... Ya estoy lo que le sigue de agotada.

—Mi amor... Me vas a dejar dormir, y ya va en serio —otro bufido.

—Te dije que no iba a haber descanso hoy, mi amor —los ojos se me abren de golpe. El me mira con diversión mientras yo siento que mi corazón quiere salirse de mi pecho.

Es más que obvio que lo dijo para molestarme... O persuadirme, pero a mí el corazón se me va a las nubes e incluso más arriba.

Lo beso y... Comienza a moverse... Joder...

—Chris... Por favor...

Chista, mordiéndome el labio y pronto me tiene rogando porque no pare.

Lo odio. En verdad lo hago.

Mis piernas están enredadas en sus caderas, acercándolo a mí tanto como me es posible, mis uñas resbalan por toda su espalda, sus manos me sostienen con brusquedad por las caderas y se prende de mis tetas como si se estuviera alimentando de ellas.

—Mírame —exije y abro los ojos, la mirada turbia y dilatada me hace soltar más de un gemido—. Tus ojos son mi perdición.

—Y los tuyos la mía —atraigo su rostro a mi.

—Dilo.

Mi pecho sube y baja. Sus embestidas aumentan, golpea con fuerza contra mí.

—¡Dilo! —sujeta mi mentón con fuerza.

Jadeo.

—Te amo —envuelvo los brazos en su cuello—, te amo mucho, mi amor.

—Solo a mi, nena, ¿Queda claro? —no contesto, perdida en las sensaciones que me causa—. Respóndame, teniente...

—Solo a ti, amor —le doy lo que quiere—. Solo te amo a ti...

Me dejó ir con un grito entrecortado y el se entierra más en mi, corriendose en mi interior. Atraigo su rostro de nuevo a mi rostro y lo beso, primero sus labios, después sus ojos, mejillas, mentón, frente... Me encanta llenarlo de besos.

—A ti y a nuestros bebés —añado, más tarde cuando el me atrae a sus brazos para dormir.

Gruñe, mordiéndome el cuello.

—Los voy a...

—Nada, los tres son mi vida —lo calló, llevando su mano a mis labios—. Los amo a los tres —me doy la vuelta para quedar cara a cara con el—. A ti —beso sus labios—, a Milenka —su mentón—, y a Owen —su mejilla.

One Shots ChrischelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora