–¡10 vueltas al campo! —Gritó Jeongyeon mientras le echaba una mirada al grupito de Jungkook los cuales pasaron de ella.
–Que pereza de mujer por Dios—Chaeyoung no la soportaba
El "grupito" estaba en una esquina de las bancas de la cancha vagueando mientras sus demás compañeros "corrían" porque hacían de todo menos caso a lo que decían Jeongyeon. Cada vez que no les prestaba atención estos aprovechaban y se detenian para no hacer nada luego que volvía a mirar volvían a correr.
–La fe que tiene de que me ponga a correr son tan increíbles que quisiera tenerlas cuando veo las notas de los exámenes—Habló Jungkook.
Jeongyeon llevaba casi toda la hora escuchándolos y viendo como no hacían nada, sabía que ese grupito se las daban en ser los reyes y por eso no les hacían caso a nadie y por eso era difícil domarlos.
Cansada de la situación se acercó a ellos con esperanzas de que estos les hicieran caso aún sabiendo que no lo tendría pero como dicen por ahí... Soñar no cuesta nada.
–Oigan —Ignorada. —Ustedes cinco ¿Saben que están en clase? Dejen de hacer nada y hagan lo que sus compañeros están haciendo —Otra vez fue ignorada.
Resignada se fue mientras el grupito que disimulaba no escucharla se reían por lo bajo.
–Se los dije, tenía demasiada fe—Jungkook levantó la cabeza junto con los demás mientras se reía.
–Oigan chicos que haremos esta tarde—Está fue Sana quien habló, los demás se miraron entre si buscando algún tipo de respuesta ya que no sabían con exactitud que decir.
–No sé la verdad.
–Yo hoy tengo entrenamiento con los del equipo de basket así que no puedo salir con ustedes.
–Tú Jungkook...
–Hoy viene mi padre de visita y es realmente un coñazo de vida tenerlo cerca, lo que significa que estoy libre porque no pretendo ir a casa—Puso mala cara par luego dejar el tema usando su celular.
–Tú Chaeyoung...
–Papá no es que me caíga mal, tiene sus malas actitudes y todo eso pero no lo veo desde hace tiempo y... —A diferencia de su hermano Chaeyoung le tenía aprecio a su padre a pesar de no ser el mejor padre del mundo.
–Bueno solo nos quedas tú Mo...–Fue interrumpida.
–No voy a salir —Contestó seria.
–Pero si hoy no tienes turno de noche. Para un día en que puedes salir con nosotros y dices que no, anda dale –
–Tengo cosas que hacer—Volvió a contestar sin mirarla.
–¿Cómo qué?
–¿Qué tanto escribes?– Esta fue Chae. Momo tenía un buen rato en su celular escribiendo y no le prestó atención a sus compañeros.
–De seguro estará escribiendo un fanfic en donde una estudiante le hace la vida imposible a su profesora—Jungkook dijo burlonamente—Tiene buen contenido la verdad... Enamorada de mi viejita con botox ¿Así se llamará? —Se burló y los demás también.
–Son tan idiotas— A Momo no le hizo gracia por lo que bloqueó su cel, se levantó y sin despedirse se fue dejando al grupo riéndose de su chiste que gracia no tenía pero ellos se reían de si mismos por más malo que fuera lo que saliese de sus bocas.
Jeongyeon vio a la pelinegra irse y la llamó varias veces, esta obviamente caso no le hizo por lo que se rindió y dejó que se fuera, no quería vivir lo que pasó a Nayeon horas antes.
Minutos después
Clase B
Después de el enfrentamiento que tuvo con uno de los profesores se había dirigido a la cual sería su nueva aula ya que minutos después de eso se topó con el Director Chang que le dio la noticia así sin más de que sería la maestra guía del curso.
Todo se debió a que este vio en ella algo que los demás no tenían y era poder. Se notaba que era alguien de temer y que no se dejaba de nadie mientras los demás eran como los mismos alumnos... Unos vagos que solo vivían de los cheques mensuales que llegaban a su cuenta.
Mientras miraba leía los expedientes de sus alumnos su mente disoció un momento al recordar a la pelinegra y el como la había enfrentado delante de todos. Por un lado estaba que hervia por dentro al sentir como todas esas cosas dichas por la joven la golpeaban pero por otro lado sentía cosas extrañas que le comían los pensamientos.
Algo de la menor le atraía y no sabía que era exactamente pero le gustaba sentirlo.
–Para ser mi foto escolar debo de decir que salgo muy bien en comparación a otros ¿No? ¿Usted que piensa? —Nayeon salió de su trance al sentir y escuchar a alguien cerca de ella.
Giró su cabeza y se encontró con la japonesa recostada y sentada en la orilla de la mesa mirándola de una manera extraña.
–Se que muchas chicas y chicos se pierden al verme pasar o sueñan conmigo al ver mis fotos ya que soy inalcanzable pero no sabía que tenía ese poder en ustedes los profesores —Dijo con un tono provocador.
Nayeon no sabía que hacer exactamente y Momo tampoco, era como si una llama se estaba creando dentro de ellas y cada una tenía un nombre escrito el cual solo podían apagar... Ellas.
Desde que Momo la vio fue como si algo dentro de su mente cambiara y no podía sacársela de la cabeza por más que no le diera importancia. Igual Nayeon, a pesar de haberla humillado delante de todos sentía algo en su interior que le hacía pensar en la pelinegra todo el tiempo y a pesar de lo ocurrido le gustaba esa sensación.
Apenas llevaba 4 horas en el colegio y es como si estuviera viviendo mil años. No podían negar que en esas cuatro horas no pensó en la joven chica problemática como todos la conocían, para tener solo 19 años era perfecta... Pelo negro, cuerpo ceñido, pechos grandes, labios gruesos.
Nayeon nunca dudó de su sexualidad, siempre decía que los hombres eran para ella hasta que los últimos años sólo mujeres llegaban a su vida. Nunca se enrolló con una ya que decía ser heterosexual pero tener en frente a la joven que poseía todo lo que a la rubia le hacia sentir extraña era algo diferente.
Ninguna de las dos decía nada más bien las expresiones y actitudes hablaban por si mismas. La frase de comerse con la mirada iba muy bien en este momento.
–Mi cara está más arriba—Dijo Momo al percatarse que Nayeon le miraba los pechos ya que estaban muy cerca de ella ya que la pelinegra se acercó a ella intensionalmente.
–Creo que deberías dejar de actuar de esta manera con tu superior, no se si actúas así con todos pero te voy a proponer no volverlo hacer por tu bien—Dijo Nayeon conteniendose.
Im estaba totalmente perdida, era su primer día en el colegio y no quería arruinarlo ni su carrera ni su vida pero si seguía teniendo a la joven a su lado de esa manera estaba claro que no iba a conseguirlo. Pudo respirar mejor cuando el timbre sonó lo cual significaba que tenía su primera clase por ende la joven morena tenía que irse a su sitio.
–Pudo perdón por lo de antes... Teacher, este era el verdadero recibimiento que merecía—Nayeon sintió una respiración en su cuello ya que Momo le habló al oído con tono muy bajo, luego de eso se levantó y se fue a su sitio.
Nayeon sacó todo el aire de su cuerpo, no sabía lo que había pasado ni porque su cuerpo se tensó y mentalmente se bloqueó, no le gustó esa sensación sobre ella. Después de unos minutos de recuperación se paró delante de todos, miró a cada uno intentando leerlos hasta que chocó mirada con el grupito de antes y peor aún con la pelinegra que la miraba como si de una pantera mira a lo lejos a su presa.
Desvío la mirada para luego presentarse y así poder dar lo que sería su primera de muchas clases tanto buenas como malas por partes de algunos acontecimientos.
Hola! Estoy súper perdida, prometo seguir con las historias y darle lo que merecen solo esperen ya que tengo un bloqueo mental y necesito estar bien.
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𝐀𝐦𝐨𝐫 𝐏𝐫𝐨𝐡𝐢𝐛𝐢𝐝𝐨 "𝐍𝐚𝐦𝐨"
FanficIm Nayeon a sus 31 años es una mujer soltera, es maestra de Ciencias en una de los colegios más prestigiosos del país. Es una mujer dominante, imponente y hermosa, es la mujer perfecta de todo hombre lo malo es que no le gusta ni les da la atención...