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Namgu, Corea Del Sur

–¡¿Se puede saber donde está Momo?!—Gritó el hombre, voz que se escuchó en todo el edificio. Varias personas dejaron de hacer lo qie estaban haciendo y pusieron atención a él—¡Jackson ven aquí ahora!–

–Si señ...

–¡Si señor ni que nada! Quiero que me digas porque Momo aún no ha llegado! –

–Señor ya le dije que Momo está ausente por unos días, ella está de viaje por temas esc...–

–Me importa muy poco que esté de viaje, la quiero aquí ahora, me vale muy poco como la traigas mientras sea en perfecto estado todo bien–

–Jefe eso no es posible, hablé con ella y me dijo que en cuatro días estaba aquí–

–¿Tú no entiendes verdad? La quiero ahora aquí, he estado aplazando entrevistas con múltiples empresarios millonarios interesados en ser quienes representen la imagen de Hirai estamos a una semana de comenzar la lucha y Momo en vez de estar entrenando hasta que los huesos se les enfríen decidió que tomarse días libres y vivir muy campante era lo mejor ¿No?. Todo ha aumentado, el dinero, las apuestas, de ella depende que ustedes cobren así que no sé que hacen que no la traen–

–Entienda que Momo aún estudia, no creo que... –

Siwon tomó a Jackson del cuello y lo empujó a una de las vitrinas de cristal donde posaban los trofeos de Momo justamente ya que era la única capaz de ganarle a quien sea ya sea chico o chica. El impacto del choque fue fuerte lo cual hizo que se rompiera el vidrio, Jackson sintió un leve ardor en su espalda, se había cortado pero esto no le importó a su jefe pues seguía chocandoló.

–A mi no me interesa lo que ella haga con su vida mientras esté aquí trayendo dinero a mi mano todo está bien, lo demás me da igual. Ya fracasé una vez en el pasado y costó muy caro ¿O ya se te olvidó? No voy a desaprovechar ninguna  oportunidad que tengo con Hirai, así que deja de decirme que esta en un viajecito escolar y tráemela de una buena vez o mejor te mando a la calle que estoy seguro que te va a gustar vivir como un maldito perro suelto sin dueño–Dicho esto soltó bruscamente al chino y con todasas miradas de sus trabajadores se largó.

Varios compañeros de Wang se acercaron a él y lo ayudaron con sus heridas.

–Solo estoy esperando que llegue el día en que salgamos de aquí y no tener más deudas con este hombre, es horrible seguir tratándolo, un día de estos va a quedar totalmente loco–

–Si es que ya no lo está–

–No sé cuanto más tenemos que aguantar, es capaz de matarnos solo por dinero–

–¿Eso te sorprende? Pensé que ya lo tenías claro, a Siwon no le importa nadie con vida de aquí –

–Dejen de hablar tanto y terminen de limpiar mi herida–Jackson mandó a callar a Mark y Jaebum quienes discutían entre ellos por su jefe.

Wang no sabía que más hacer, sabía que se venían días demasiados intensos para todos y era algo que no le agradaba en absoluto. Era como si todos tuvieran una maldita bomba encriptada en el cuello la cual no pueden quitarse y sienten que en cualquier momento van a explotar.

Por el bien de ellos Momo debía volver lo antes posible.










Mientras tanto....

–¡Punto para el equipo de los Leones!–Gritó Taehyung, el equipo liderado por Bambam se unió en un abrazo mientras el equipo de Momo por séptima vez estaba en el suelo.

–Esto es humillante–Dijo Yeji mientras dejaba ver en su cara la frustración de perder tantas veces.

–No es justo, ellos tienen un equipo más fuerte. Tienen a Jungkook a Bambam, Suga, Wooyoung y nosotros.... Aghs no quiero seguir jugando a esto– Se quejó Félix.

𝐀𝐦𝐨𝐫 𝐏𝐫𝐨𝐡𝐢𝐛𝐢𝐝𝐨 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora