First and Only Love [Simón Miller]

Cap 13

Seis años antes...

—Hola—entro a la casa de Simón cuando me abre la puerta

Mi piel aún pica por lo que pasó hace dos días. Pica por toda la sangre que tuve que lavar sin cesar para sentir un mínimo de alivio.

Sigo sintiéndome sucia, no me importa pero nunca había reaccionado de una forma tan impulsiva antes. Es extraño.

—Hola, preciosa—el beso que deja en mis labios me despoja de inmediato de esa sensación extraña—. ¿Tienes tu vestido para mañana?

Mis hombros caen.

La graduación. La suya.

Nuestra universidad es más corta en la FEMF, lo que la hace mucho más agotadora y estresante. Todas las carreras duran la mitad, así que ya es hora de que Simón se gradúe.

—Sobre eso... quiero hablarte de algo—el nudo que se forma en mi garganta duele mucho, pero es algo que debo hacer

Toda mi vida supe que Simón era bueno. Simón es amable, caritativo, le pesan las cosas malas que debemos hacer como soldados.

A mi nunca me importó. Hasta hace tres noches cuando perdí el control en una misión y asesiné a todo el que se me cruzó en frente.

Nunca me había importado ser quien soy. Mis impulsos, mis pensamientos con los que tengo que lidiar entre las misiones. Pero eso cambió. Porque me di cuenta que Simón jamás haría lo que yo, que es demasiado bueno para mi.

«Regina se burlaría si me escuchara. Siempre dijo que heredé un poco de la estupidez de Reece»

—¿Pasó algo?—me mira preocupado y asiento, tomando su mano para llevarlo al sofá

No puedo decirle la verdad. No puedo condenarlo a estar a mi lado...

Simón me ama, me ama tanto que estoy segura que diría que no le importa nada de lo que haya hecho.

«Mereces a alguien a quien no le importe que tan malo puedes ser, porque una cosa es el mundo y otra cosa son las personas que amamos» las palabras de mi abuelo se filtran en mi cabeza.

No puedo ser tan egoísta.

—En unas horas volaré a Rusia con Chris, pedí mi transferencia—le informo a Simón y su rostro decae en un ceño fruncido y mirada confusa—. Me ofrecieron un puesto como Capitana de tropa, Simón, es una buena oportunidad para mi.

—Bueno, eso es maravilloso—sonríe y niego—. ¿No lo es?

—Si, pero...—respiro profundo. «Vamos, solo suéltalo»—. Necesito enfocarme únicamente en el trabajo, Simón. Nuestra relación me quita tiempo y una relación a distancia es agotadora—me encojo de hombros fingiendo indiferencia aunque me esté quemando por dentro—. Mi trabajo y mi futuro son más importantes que nada. Creo que es mejor dejar las cosas hasta aquí.

—Tu trabajo y tu futuro...—parpadea sorprendido—. Rosie, podemos seguir con esto, no necesitamos hablar todo el tiempo y...

—No—lo corto, llevando mis manos a mi cuello para quitarme el collar que me regaló cuando me pidió ser su novia—. La decisión está tomada, Simón. Esto se acabó—dejo la joya en su mano—. Espero que encuentres a alguien mejor, que si te merezca. Lo siento.

Con eso me levanto, me alejo lo más rápido que puedo mientras escucho sus pasos seguirme, lo que vuelve mi corazón un nudo muy doloroso.

—Rosie—toma mi muñeca y tira de mi cuerpo hacia el suyo, haciendo que el dolor en mi pecho se intensifique—. Rosie, dime la verdad.