AMOR LETAL [OMEGAVERSE] ©

20.

ACTUALIZACIÓN 1/4

Rompecabezas.

Muchos utilizaban los rompecabezas como un simple juego de entretención. De cierta manera, se necesitaba tener un pensamiento lógico, memoria visual y una coordinación de óculo-manual.

Los pequeños siempre iban a ser sencillos de armar, pues las piezas eran más grandes, en menor cantidad y con las formas demasiado sencillas de ir ordenando. En cambio, los grandes requerían una concentración y agilidad mayor. Las piezas aumentaban y también se debía aumentar la velocidad.

Mika era bueno armando aquello, aunque no se había vuelto bueno por gusto, sino que como un método para ir mejorando sus capacidades. Todos los días obtenía un rompecabezas nuevo donde debía aplicar todas sus habilidades. De esa manera, había podido mejorar su memoria y obtener una memoria fotográfica muy avanzada. Solo le bastaba ver una cosa para recordarla siempre. Con ver un rostro un segundo, lo podía reconocer.

Y, de es misma manera, podía juntar piezas mentalmente para ir comprendiendo algunas cosas.

Se tomaba sus minutos para procesar toda la información e ir armando todo aquello que estaba desordenado.

Para aquel momento tenía muchas piezas separadas, por ende, debía ir comenzando a ordenarlas. Debía obtener lo más rápido posible las piezas que le permitieran formar todo el final de lo que estaba planeado. Sabía muy bien que, si movía un pieza equivocada, entonces iba a obtener un castigo.

Soltó un suspiro y tomó el rey blanco del ajedrez. Lo observó con calma porque sabía que era poderoso. Porque sabía que el rey podía hacer muchas cosas en el tablero y era quien más puntos valía.

Luego, se puso de pie. Caminó por el pasillo e iba un día de haberse encontrado con Slavik en ese restauran. No había obtenido nada, pero era bueno esperando. Sabía más que bien que iba a ir donde él tarde o temprano y que siempre era mejor tarde que nunca.

Avanzó por el pasillo y llegó hasta una sala donde habían muchas cosas tecnológicas.

Observó al chico que se encontraba ahí. Siempre estaba pendiente de todo y era encargado de obtener mucha información, además de ser quien siempre hackeaba lo que era necesario.

—Hola, Gael, ¿cómo va todo? —preguntó para irse acercando con lentitud, hasta llegar a su lado —. ¿Buscaste lo que te pedí?

El chico asintió ante aquel susurro.

—Estoy revisando estos temas de aquí. Viktor quiere que obtenga unos papeles y más. Ya sabes como es y no quiero retrasarme —comentó con tono normal, para luego, en un pequeño susurro, decir—: Realice la búsqueda que me has pedido. No fue sencillo de encontrar porque muchos datos estaban perdidos, pero he logrado obtener algo mínimo que te podrá servir.

—Viktor no sabe mucho, de seguro que te ha pedido una tontería —bromeó y ambos rieron —. ¿Dónde lo tienes?

No obtuvo respuesta de inmediato. Ambos sabían lo sigilosos que debían ser y lo bien que debían actuar.