ACTUALIZACIÓN 1/4
Mika estaba cansado.
Cansado de diferentes formas. Aún durmiendo se sintió así y quiso dormir. Quiso dormir por mucho tiempo. De cierta manera, hace demasiado que no dormía en paz, sabiendo que todo estaba bien y que no existía motivo alguno para tener que dormir con un cuchillo al lado para poder cuidar su pellejo.
Mientras dormía, muchas cosas se fueron presentando.
Para el momento en que fue abriendo sus ojos, se dio cuenta de que estaba en medio de un campo de flores. Eran miles de diferentes colores, tamaños, aromas y más.
Slavik le había dado flores muchas veces ya, pero le dio la idea de que estaba en un paraíso de ellas. Se puso de pie y bajó la mirada para encontrarse con sus pies descalzos. No se preocupó por ello. Pudo notar que el pasto era suave y comenzó a dar unos pasos por el lugar.
Le dio curiosidad saber en qué parte se encontraba porque era un sitio que nunca antes había visitado. No creyó que, realmente, pudiera existir un campo de flores tan hermoso y mágico.
La brisa fresca fue moviendo su cabello, de un tono casi naranjo, y no se detuvo. Caminó, caminó y caminó hasta que comprendió que no importaba mucho a dónde quisiera ir, pues todo era lo mismo. No se veía algo diferente, tampoco alguna montaña. Lo único que pudo observar eran las flores que se movían con la brisa.
Inhaló profundo y mantuvo sus ojos cerrados.
El sol dándole en el rostro, la brisa a su alrededor, de cierto modo, todo eso le hizo comprender lo que era la libertad. Que todo se limitaba a poder sentir la brisa en el rostro, a caminar descalzo por el pasto y a sentir los rayos del sol en su rostro sin que nadie se lo pudiera impedir. Sonrió porque ya era dueño de sus pensamiento, emociones y, lo más importante, dueño de su cuerpo.
Al oír el sonido de una rama quebrarse, dirigió su mirada de inmediato a su derecha.
El bosque enorme que vio, lo dejó atónito. Sabía que, hace un segundo atrás, no estaba ahí. Dio unos pasos con lentitud y cierta duda sobre lo que se podría encontrar. Imaginó que era un oso, hasta que el zorro pasó corriendo.
—¡Espera! —gritó.
Sus piernas se movieron antes de que le diera la señal. En ningún momento alguna espina o astilla hirió sus pies, solo corrió siguiendo el animal.
Lo último que podía ver era su cola esponjosa y anaranjada desaparecer entre los árboles y no comprendió porque lo estaba siguiendo. Fue solo siguiendo su instinto, la sensación que le hacía ver que ese zorro quería mostrarle algo. Al ver que se detenía mucho más adelante, como esperando a que lo viera, aceleró el paso.
Esquivo unos árboles y, al caer sobre sus rodillas, se recompuso de inmediato. Ignoró que su garganta estaba seca o que su corazón latía en un descontrol por completo.
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AMOR LETAL [OMEGAVERSE] ©
RomanceSlavik siempre estuvo en la cima. Todos se postraban a sus pies y nadie se atrevía a desafiarlo, a no obedecerlo. Siendo el líder de la Mafia dorada de Rusia, su pasado era oscuro, pero su presente estaba lleno de muerte, sangre y más. Nadie sobrevi...