ACTUALIZACIÓN 3/3
Slavik no estaba muy de acuerdo en tener a Prasko en una de sus casas, pero Mika le había asegurado que podía hablar con él y solo confió.
Entró y Prasko fue cargado por uno de sus hombres. Indicó donde lo podían dejar. Era una habitación pequeña y en el primer piso, evidentemente, una de las habitaciones que solo la servidumbre podría utilizar.
Mandó a una de las sirvientas a llamar a un doctor lo más rápido y supuso que sí se había pasado un poco de la raya con los golpes.
Luego, pensaba que, en su defensa, Prasko había comenzado y luego no se la había aguantado. Soltó un suspiro notando que Mika estaba muy centrado en su hermano. Puso mala cara para salir y dejarlos solos.
Dio unas ordenes rápidas a sus hombres porque, si Prasko estaba ahí entonces no se iba a quedar sentado y de brazos cruzados. Debía mantenerse alerta. Y, como la casa era una que no estaba muy alejada del centro de la ciudad, el médico no tardó en llegar. Tampoco le agradaba el hecho de tener que pagarle dinero para que vea a Prasko, pero ya notaba que no tenía de otra.
Lo había visto mal y casi desesperado por su Omega.
En cualquier otro momento, eso le habría dado lo mismo, no obstante, ahora no. Si pensaba en que alguien torturaba a Mika, le daba sensaciones amargas en el cuerpo. Cerró sus ojos estando sentado en el sillón nada más mirando el suelo.
Admitía que había disfrutado golpearlo y se había divertido, pues Prasko no era sencillo y tenía inteligencia para dar golpes brutales, pero, después de mucho tiempo, como que casi experimentó arrepentimiento.
Tras salir el doctor, se mantuvo ahí mientras sus heridas eran curadas. No se preocupó del dolor. Sus heridas fueron limpiadas y suturadas y ni una solo mueca se presentó en su rostro.
Luego, solo fue a la cocina para beber un poco de agua.
Ya era de noche y, evidentemente, no podía hacer algo más. Le tranquilizaba saber que su madre estaba bien y ahora muchísimo más vigilada. Viktor andaba por ahí con su padre y, si se descuidaba un solo segundo, entonces todo podía terminar mucho peor. Considero incluso ocultar su madre treinta metros bajo tierra.
No quiso comer y Mika no salió de donde estaba con Prasko. Le restó importancia para subir las escaleras e ir a su habitación. Le quedaba el descansar, aunque rara vez dormía ocho horas, tuvo ganas de hacerlo.
Prasko estaba con un sedante, por ende, se aseguraba de que no iba a despertar hasta mañana.
Soltó una sonrisa al recordar sus golpes. Le agradaba pelear con quienes lo podían igualar y Prasko, aunque estaba solo, le había dado una buena pelea.
Abrió la puerta observando la habitación limpia y perfecta. Quiso tomar una ducha. Sus heridas tenían parches respirable, así que no existía impedimento alguno para hacerlo. Y rara vez se duchaba con agua tibia o caliente. Estaba acostumbrado a siempre hacerlo con agua helada. Era capaz incluso de salir e ir a bañarse al río congelado.
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AMOR LETAL [OMEGAVERSE] ©
RomanceSlavik siempre estuvo en la cima. Todos se postraban a sus pies y nadie se atrevía a desafiarlo, a no obedecerlo. Siendo el líder de la Mafia dorada de Rusia, su pasado era oscuro, pero su presente estaba lleno de muerte, sangre y más. Nadie sobrevi...