Kung Fu Panda #3

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Espero que les guste~

Nota: Me imagino a MK más o menos de la altura del Maestro Shifu, quizás un poco más alto. Para que tengan una referencia :3

Nota-2: Tengan en cuenta que MK sigue siendo del mundo de lego, no tiene la oportunidad de ser muy grande xD

MK no puede negar que esta un poco cautivado, el Palacio de Jade se ve majestuoso y del tipo de lugares que solo puedes ver en un documental o en un tour pero lo tiene enfrente suyo y es impresionante, incluso si lo hace sentir más pequeño de lo que ya es.

-Quiero explorar~- piensa con puro entusiasmo, sin notar el destello dorado que ilumina sus ojos, más ocupado en avanzar con toda la intención de cumplir ese pensamiento pero no llego muy lejos, chillando ante el firmo tirón que venía de la ropa robada que tenia puesta y medio retorciéndose al ser alzado, intentando ignorar que de seguro se veía como un cachorro o algo así. -Ah, lo siento...- le muestra una sonrisa temblorosa a Tigresa, la que lo alza, mientras ella siente cierta curiosidad por el tono dorado que abandona lentamente los ojos oscuros. -...me emocione- había olvidado lo extraño que era estar en ese modo mono, concentrarse ya es difícil pero así es peor y solo va a empeorar mientras más permanezca de esa forma.

-Me temo que no podemos dejarte vagar así nada más- la felina es seria y firme pero hay algo suave y amable tanto en su expresión como en su voz.

-Si, lo siento, amiguito- Po se para al lado de ella, mirando al castaño con pena y diversión al mismo tiempo, luciendo casi como si quisiera reírse y el sucesor se imagina que se ve gracioso por la forma en la que esta siendo sostenido. -Hay muchas cosas peligrosas y geniales por aquí, así que es algo peligroso, en especial para alguien que no conoce el lugar y lo que puede hacer cada cosa-

-Me lo imagine- bufo, su cola agitándose. Eso le suena mucho a la casa de su maestro, aunque eso nunca lo detuvo y así es como terminó allí. -¿Podemos ver a los demás?- se remueve, logrando aferrarse al brazo ajeno y acercarse. Es un mono, treparse para poder agarrarse a la espalda ajena es mucho más fácil de lo que había esperado. Tigresa parpadea ante la confianza repentina, observando la cola castaña que se envuelve en uno de sus brazos. No muchos tenían el valor de tocarla así nada más. -Tengo tantas ganas de conocer a los demás...- se apoya en el hombro ajeno, imaginando todo lo que el panda había logrado contarle sobre los 5 furiosos que protegían el valle. -...nunca en mi vida me imagine a una mantis religiosa que pudiera pelear, así tengo mucha curiosidad. Y sé que las serpientes son super ágiles...- esta divagando un poco.

-No es un pariente lejano tuyo, ¿o si?- Tigresa miro al panda, haciendo un gesto hacia el mono que se niega a bajarse de su espalda.

-Eh, no, no lo creo- Po se rasco la nuca con una sonrisa nerviosa, preguntándose si el hablaba tanto como el mono. -¿Estás bien, Ti?- el recuerdo de que ella no estaba muy acostumbrada a tacto en especial viniendo de alguien que no conocía, vino a su mente y se preocupo. -MK, amigo, Tigresa no es muy...buena con el contacto físico- había mejorado mucho en comparación a cuando llego pero aun le quedaba un largo camino que recorrer a la felina.

-¿No?- MK se centro ante eso, parpadeando, moviéndose para alzarse por encima de uno de los hombros ajenos para poder mirarla en busca de signos de incomodidad. -¿Estás bien?- se sintió un poco avergonzado por no preguntar, porque tenía a Macaque que no estaba acostumbrado al contacto físico y siempre se esforzaba en preguntar. -¿Quieres que me baje?- el agarre de su cola se afloja, totalmente dispuesto a saltar hacia el suelo pero hay una pata repentina bajo su barbilla, en una extraña caricia que lo hace erizar por la sorpresa, solo para relajarse y apoyarse pesadamente en el toque cuando ella rasca un punto particularmente bueno que no sabía que tenía. -Oh, eso es lindo~- hace un sonido parecido a un ronroneo que intenta callar lo mejor posible. Siente que puede derretirse.

~Monkie Kid~ 6️⃣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora