FINAL

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Omnisciente

El príncipe Iku conversaba con el rey Todoroki en el gran y frondoso jardín, en esos días que tuvo el apoyo del mayor había aprendido bastante de él así como había hecho una buena relación con el alfa.

Shoto aún se sorprendía cada que escuchaba hablar a Iku con tanta sensatez e inteligencia, de alguna forma comprendía porque Katsuki le cuidaba tanto.

Había escuchado de cómo Kai y Kaito eran guerreros formidables, que juntos eran invencibles en batalla, "Las cuchillas danzantes" fueron llamados por los reinos.

Pero el príncipe menor de verdad era una joya, inteligente, bondadoso y totalmente encantador. Su belleza tanto física como interna era cautivante. El príncipe omega redefine los estándares de la realeza, amado y respetado por todos.
Shoto no tenía miedo en decir que era perfecto.

Esto solo le hacía lamentarse aún más que Katsuki haya rechazado su propuesta.

— ¡Príncipe! — llegó un mensajero con apuro — Rey Todoroki — hizo una inclinación con respeto — Han vuelto — la cara del menor cambió por completo.

Ni siquiera espero un segundo más, simplemente comenzó a correr para salir del castillo a recibir a su familia, él iría hacia ellos — ¡Príncipe, espere! — los guardias comenzaron a correr detrás del omega para no dejarle ir solo.

Shoto solo sonrió, a decir verdad no estaba muy preocupado, confiaba en que todo saldría bien.

El día del esperado reencuentro, el reino resonaba con un zumbido de emoción. El príncipe omega, con el corazón latiendo con fuerza, espero en la entrada del castillo, los guardias no le dejaban salir.

Katsuki dejó muy claro que mientras ellos no estuvieran, Iku no debía de poner un solo pie fuera del castillo.

Sus ojos escudriñaban la puerta principal con nerviosismo mientras su mente se llenaba de imágenes de su familia, imaginando cómo sería volver a abrazar a cada uno de ellos después de la separación, esperaba ver a todos sanos y salvos, en especial a Izuku que era a quien más extrañaba.

Finalmente, el sonido de pasos resonó en el pasillo, y la puerta se abrió lentamente. Primero entraron los guardias, seguidos de sus padres, cuyos rostros mostraban las huellas del conflicto pero también una profunda gratitud por estar juntos nuevamente.

Iku contuvo el aliento cuando vio a Izuku. Corrió hacia él y lo abrazó con fuerza, sintiendo su cálido aroma y su corazón latiendo junto al suyo, ambos derramando lágrimas de felicidad.

— Mi dulce niño... — susurró Izuku acariciando el cabello de su hijo con ternura.

— ¿Estás bien? — preguntó el menor viéndole al rostro con una pequeña sonrisa.

Izuku asintió devolviéndole el gesto a la vez que limpiaba las lágrimas que bajaban por las mejillas de Iku.

Luego, sus ojos se posaron en su padre. Se abrazaron con fuerza, compartiendo un momento de silenciosa complicidad que trascendía las palabras, Kai y Kaito se unieron al abrazo donde se podía sentir el amor que había en la familia, como se habían extrañado y deseaban estar juntos de nuevo.

Las lágrimas de alegría y alivio brotaban libremente, envueltos en el calor del amor y la gratitud por haber superado el caos de la guerra.

Mientras tanto, Denki no dejaba de besar las mejillas de su amado y de su hijo, estaba derramando felicidad, estaba tan aliviado de que ambos estuviesen bien.
Kirishima tenía una gran sonrisa en su rostro, se sentía bien estar de vuelta en casa, estar de vuelta con su amor.

Salvaje [Katsudeku] (Omegaverse) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora