*Basado en House of the Dragon*
Alyssa Targaryen, hija mayor del rey Viserys I y su primera esposa, Alys Lannister, pero para ella, no hay más madre que Aemma Arryn, la madre de su hermana Rhaenyra.
No era la sombra de su hermana, sino la princesa...
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—Eso fue genial.
—¿Cuándo fue la última vez que dormiste toda la noche en la misma cama que una mujer?
—Planeo que sea así siempre.
—¿Qué hay en el itinerario?
—Aún es muy temprano, ¿por qué no duermes otro poco?
—Aegon, no podré salir de aquí, ¿verdad?
—Lo prefiero, cuando logremos sacar a Rhaenyra de Roca Dragón, asentarás nuestra corte allá y ahí criaremos a nuestros hijos.
—Tranquilo, usurpador— se sentó a horcajadas sobre su regazo—, no es tiempo de hacer crecer a la familia. Primero aniquilamos a Rhaenyra, después nos preocupamos por la sucesión.
—¿Qué plan tienes en mente?
—Déjamelo a mí.
Desayunaron en privado, en compañía de su esposa. A Helaena le agradó la idea de no tener que compartir habitación con él, podrían estar divorciados, pero aún aborrecía cómo la había tratado en ese par de años. Compartió comida junto a sus gemelos Jaehaerys y Jaehaera, al igual que con el pequeño Maelor y sus criadas. Alicent, como de costumbre, no se presentó, diciendo que estaba indispuesta. Llevó a su primogénito a tomar sus lecciones matutinas mientras ella iba a jugar con su pequeña, la nodriza se encargaba de Maelor, los dos bajo a la atenta supervisión de la madre.
—Espero que valga la pena.
—¿¡Dónde estabas!? Hace un mes que te buscamos, ¡hay una guerra que ganar!
—Las hazañas las logro yo, debilité el bando de Rhaenyra y puse a Alyssa de nuestro lado.
—¿Qué te hace pensar que no vengará a su hermana? ¡Le has matado al hijo! — se burló su hermano y Larys contuvo la risa.
—¡Que la Madre se apiade de nosotros!
—¿Cómo pudiste estar tan ciego habiendo perdido un solo ojo? — secundó Otto Hightower.
—La legítima sangre del dragón— Aegon se levantó a servirle vino y ordenó que le llevaran las mejores mancebas a su cámara—. No vuelvas a desaparecerte.