Cap 47

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Narra Israel: Estos últimos días habían sido una locura. Recibí la noticia de que iba a ser convocado para un partido amistoso entre México y USA. Era algo con lo que había soñado desde niño, pero nunca pensé que llegaría tan pronto.

Aparte de los entrenamientos en el club América, que ya de por sí eran bastante intensos, ahora tenía que prepararme para lo que venía con la selección. Mi tiempo libre prácticamente desapareció, y lo poco que quedaba, lo usaba para revisar detalles del viaje, la logística y asegurarme de que todo estuviera en orden.

Con tanto en la cabeza, me di cuenta de que no había tenido tiempo para algo importante: hablar con ___. Hacía semanas que nuestras conversaciones eran cortas, sabía que estaba ocupada con la universidad y sus amigos en Argentina, pero no podía dejar de pensar que habíamos perdido ese ritmo que teníamos antes de que se fuera.

Durante uno de los entrenamientos ya con la selección, me acerqué a Malagon mientras hacíamos estiramientos al final de la sesión.

Malagon: Se te ve pensativo, Isra. ¿Todo bien?

Israel: Sí, todo bien, solo... muchas cosas en la cabeza.

Malagon me miró de reojo, sabiendo que había algo más.

Malagon: ¿Tiene que ver con ___?

Asentí, bajando la mirada un segundo.

Israel: No hemos hablado mucho últimamente. Entre su vida allá y todo lo que está pasando con la selección, siento que hay una distancia que no es solo física, ¿sabes?

Malagon: Es normal, Isra. Están en dos mundos diferentes ahora mismo. Pero si de verdad te importa, no dejes que eso te frene. Encuentra tiempo para hablar con ella, aunque sea un mensaje rápido. A veces, solo necesitan saber que estás ahí.

Sus palabras me golpearon más de lo que esperaba. Tenía razón, había estado tan envuelto en todo lo que estaba pasando que había descuidado esa parte de mi vida.

Israel: Sí, tienes razón. Después del entrenamiento, le mando un mensaje.

Terminamos los estiramientos y, al regresar al vestuario, el entrenador se acercó con una sonrisa.

Javier: Isra, quiero verte listo para el partido. Has estado haciendo un gran trabajo, pero ahora el nivel sube Estados Unidos no es cualquier rival.

Israel: Claro profe. Voy a dar lo mejor.

Sabía que ese partido era crucial, no solo para mí, sino para mi futuro en la selección. Pero a pesar de la presión, seguía sintiendo ese vacío por no haber hablado con ___. Me cambié rápido y, mientras los demás bromeaban y hablaban del entrenamiento, tomé el teléfono para revisarlo. Sin embargo, en lugar de escribirle, volví a guardarlo. Sabía que necesitaba un momento adecuado, no podía mandarle cualquier mensaje apresurado.

Esa noche, al llegar a mi departamento, Malagon me mandó un mensaje.

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Mala 🦸🏻‍♂️

Malagon : ¿Le escribiste a ___?

Israel: No, aún no. Pero lo haré. Solo quiero que sea el momento adecuado.

Malagon: El momento perfecto no existe, Isra. Solo hazlo.
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Tenía razón, otra vez. Me quedé un rato más pensando, con el teléfono en la mano, hasta que finalmente decidí escribirle. No sabía cómo reaccionaría, pero sentía que no podía seguir dejando pasar más tiempo.

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                             TN 💘

Israel: Oye, sé que estos últimos días han sido una locura, pero no he dejado de pensar en ti. Perdón por no escribir tanto, pero te extraño. Espero que todo esté bien allá.

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Me quedé mirando el teléfono, esperando una respuesta, sabiendo que aunque tardara, en algún momento la recibiría.

Pero te conocí. -Israel Reyes y tú-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora