Mi Niña Salvaje | Camren

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Volví a terminar mi desayuno, nadie hizo preguntas, excepto Sofi que preguntó por Lauren. Mi madre tenía una pequeña discusión con Sofi. Sofia quería llevarse tres de sus muñecas, pero mamá le dejaba llevarse solo una. Mi hermana le insistía en que si se llevaba una se iba a sentir muy sola y que tenía que ir con otras de sus amigas. Mi madre se rindió, tratar de convencer a Sofia que no haga algo es casi imposible, ella salió sonriendo con sus tres muñecas y su pequeña mochila mientras mamá se regañaba a si misma por mimar tanto a Sofi.

—Papi, antes de que te vayas necesito hablar contigo— lo acompañaba a un paso lento hacia la puerta, ya era hora de que fuera al trabajo.

—¿Es sobre Lauren?

—Si, necesito que me ayudes a contactar a su familia ¿Tendrás ese tipo de contactos?— debe tenerlos, papá se ha hecho muy popular y ha conocido a muchas personas.

—Puedo decirle a mi secretaria que busque a alguien para eso ¿Qué sabes de Lauren?— nos detuvimos en la puerta, le acomodé un poco el cuello de su camisa y la corbata.

—¿Tienes para anotar?

Sacó su agenda y un bolígrafo. Nombre, apellido y su fecha de nacimiento, era todo lo que Lauren tenía consigo y lo único que sabía.

—Que te vaya bien en el trabajo, te quiero papi—  le di un abrazo, el me correspondió con uno de sus abrazos de oso.

—Yo también princesa.

Salí con él, pues tenía que sacar las cosas de Lauren de la camioneta. Y tengo que ser cuidadosa para hacerle de comer a Minina, que ya debe estar volviéndose loca. Debí haber traído el comerdero de Max que estaba en el yate.

Pido el favor a una de las chicas de servicio, Beth, que prepare una de las habitaciones para Lauren y que haga el favor de colocar sus cosas en un lugar visible para que Lauren pueda hacer lo que quiera con ellas.

Mientras paso el tiempo con Minina, quien es muy inquieta y no se queda en un solo lugar, veo de nuevo las extrañas manchas que tiene en su oscuro pelaje. Abro el navegador de mi móvil para investigar sobre esas manchas. Puma negro con manchas. Mi móvil vibra antes de que de paso a mi investigación, es un mensaje.

De Dinah:

—La estas acostumbrando a que abran la puerta por ella, que caballerosa.

—Subir en un ascensor con Lauren es de lo más divertido, está entrado en pánico.

Para Dinah:

—No seas tan idiota e intenta calmarla, esto es nuevo para ella.

Vuelvo a el navegador y le doy a buscar lo que he escrito. Los resultados no son lo que me esperaba.

— ALTO: ¿Sabía usted que no existe el puma negro?

—Las 10 confusiones más comunes que tienen las personas sobre el mundo animal.

—Engaños de mercadotecnia y sus logos promocionales.

¿Entonces no existe el puma negro? ¿Qué es eso que se mueve a mi lado entonces? Busco puma solamente, y me encuentro con que los pumas tienen un pelaje dorado, como los leones. Sin muchas opciones y con falta de creatividad busco: Animales felinos negros con manchas en el cuerpo.

Pantera negra.

Melanisimos jaguar y leopardo, la increíble pantera negra.

Busco imágenes y hay muchos parecidos a Minina, con manchas como ella, creo que he dado en el blanco. Vibra mi móvil en la mano, me ha llegado un mensaje.