—Como se nota que ese maldito no te ha dicho la verdad. Y es eso mismo lo que lo va a condenar, la verdad. Porque gracias a la verdad tú vas a morir, y gracias a la verdad todos van a sufrir —escupió Emma.
Se quitó su corta cabellera negra dejando ver su cabeza calva. Se acercó a mí y se arrodilló para quedar a mí misma altura, ya nada podía sorprenderme, no ahora. Verla ahí, frente a mí era ver a toda una extraña. Ya sus ojos no eran azules, eran negros... pero de un negro espeluznante de esa mirada que aterra.
—Vamos a contarte... no los detalles no tengo tiempo para eso, pero si nuestras razones —la mire con atención, porque quería saber cuáles eran los motivos y entender si habían razones suficientes como para que una persona cambiara así, de esa forma tan drástica—. Empecemos por Julius, aunque debes de saberlo. El muy idiota odia a tu padre. Esta tan... enfermo que fue capaz de poner todo su dinero en nuestras manos para atraparte y hacer sentir a Spencer como un desgraciado —suspiró—. Luego viene, ah sí, el imbécil de Brad... ese niño tan frágil, tan fácil de manipular, solo me costó un par de días, unas tardes en un café, una ojeada a Sebastián y a Jared riendo felices contigo, a Liam quien logró mágicamente salir de la cárcel —volvió a suspirar y tomo uno de mis mechones y lo puso en su lugar—, solo me costó hacerle ver lo poco que valía para llenarlo de rencor y convencerlo de hacer lo que yo quisiera —había tomado mi barbilla con fuerza para mirarme a los ojos con su mirada inyectada de odio.
—¿Y tú? ¿Qué me dices de ti? —hablé entre dientes debido a sus manos que me dificultaban hablar con normalidad.
—Qué extraño que no quieras saber acerca de Hans, es que el muy ingenuo esta tostado, loco, enfermo de amor por ti —me soltó con brusquedad—. Pregúntale a Sebastián si le gustan las rubias, y si te responde que no, recuérdame. Esa maldita noche me destrozó la vida, me cambió, fui tan poco para él que ni siquiera me reconoció, ni siquiera se mortifico en pretender que me había visto en algún lugar y sabes por qué Savannah, porque es un maldito al que no le importó nada, al que no le importé. Al que traté de hacer feliz y no lo vio, me humilló y me rechazó. Pero entonces, entonces llegas tú y sin saberlo, sin siquiera esforzarte le sacas una sonrisa... por eso, tú vas a morir, aunque Hans se empeñe y diga que no, si vas a morir porque no le va a gustar cuando le diga que tú, niña rica... estas embarazada y no precisamente de él —se rió sin mostrar los dientes y la miré llena de pánico—. Quien sabe, a Hans le encanta estar de cabrón —volvió a reírse y se fue.
Boté todo el aire que había en mis pulmones, suspiré aliviada y no le di muchas vueltas a lo que Emma me había dicho. Sus razones solo me producían dolores de cabeza. Nunca le llegué a decir acerca de mi embarazo, pero sí de mi ausencia de mi menstruación. Ya no importa quienes estén detrás de todo esto, si alguna vez confié en ellos o no. Iba ver mi barriga crecer, iba a maldecir a Sebas el día del parto, e iba a ver a mi bebe crecer costara lo que costara. Desee ver a James una vez más, confesarle mi miedo y lo mucho que extrañaba estar en los brazos de papá. Como extraño a papá, como extraño sus quejas y su forma tan peculiar de decirme que me ama, la forma en la que me ha guiado hacia adelante, la buena imagen que me ha dado, y el amor que siempre le ha sobrado para darme.
No sabía qué hora era, pero sabía que el tiempo estaba corriendo. No quería cerrar mis ojos, me resistía a dormir, a pensar que si solo tal vez me dejara vencer por el cansancio, no volvería a despertar, tenía miedo, mucho miedo de cerrar los ojos y no volver a abrirlos. Lloré en silencio y mire a mi alrededor, como es que hace unas horas, o días ya ni sé, estaba tan contenta, siendo feliz y ahora... ahora veo como las cosas cambias. Como a veces estamos arriba y otras abajo. Lo importante de perdonar, para poder vivir. Lo importante de saber, que todo logro empieza con el deseo de hacerlo. Parece mentira y ahora me cuesta creer la importancia del tiempo, como se barajean las cartas de la vida, y como cambia la lógica de las cosas. Mi historia, mi nueva historia de vida comenzó en New York, cuando casi cumplía mis dieciocho... ahora no sé, si esta misma historia que hace casi un año decidí escribir se esté acabando a mis casi diecinueve.
![](https://img.wattpad.com/cover/49016741-288-k978880.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Perfectamente Imperfectos
Fiksi RemajaA veces no es suficiente teniéndolo todo, a veces la palabra "todo" no abarca lo que realmente queremos. Savannah Black lo sabía, lo tenía claro. Una chica que precedía lo perfecto ¿Cómo termina enamorándose del chico más imperfecto? Lo perfecto est...