Michael entró al salón sin saludar ni mirar a nadie, se sentó al fondo y sin quitar sus audífonos de sus oídos comenzó a jugar el jodido juego en el que Ann le había viciado. Estaba tan metido que ni siquiera se percató en que la muchacha estaba a su lado pidiéndole el móvil también, Mike rió y comenzaron a jugar o al menos el teñido dejaba que la chica jugara y ganara estrellas para él poder comprar más 'monitos'.
Calum se sentó frente a él, observándolo de forma fija, sin siquiera pestañear. Michael, un poco incómodo por esto decidió hablar.
─ ¿Qué sucede? ─Preguntó el teñido con gracia, Calum negó quitando importancia al asunto.
─ ¿Qué pasó con Luke? ─Interrogó el moreno en un tono bajo no queriendo llamar la atención de nadie y tampoco interrumpir a la muchacha que estaba al borde de la meta y la histeria también.
─ Nada, no ha pasado nada. ─Mintió el teñido con una sonrisa, en parte decía la verdad y es que con los demás no había pasado nada pero era su mente quien creaba muchas hipótesis de problemas que al final él terminaba creyendo que eran ciertas.
Calum suspiró y observó al frente, Michael se quedó pensando seriamente.
¿No pasaba nada, verdad?
Claro que pasaba, se sentía solo y es que de pronto comenzó a ser olvidado, de pronto se quedó atrás sin más que observar la espalda de sus compañeros triunfantes. Era molesto, pues tampoco tenía en quien confiar y es que todos siempre pensaban que Michael era un chico tonto y torpe que tiraba todo a la ligera, pero en el fondo no se le pasaba nada y su mente le torturaba con el más mínimo detalle.
×
Las clases fueron pasando de manera normal, Michael estuvo todo momento junto a Ann riendo exageradamente o puteando el juego y al profesor. En el receso las chicas se fueron al baño, Michael se levantó para sentarse junto a Max y Luke sin embargo este último, a penas llegó Mike, se levantó y se fue junto a Michelle.
─ Quiero morir. ─Dijo Michael ya cansado de todo y todos, Max, un chico de ojos claros y cabello rubio, piel pálida pero pecosa, de personalidad tranquila pero por dentro quizá un tanto distorsionada, le observó con la molestia total y perfectamente esculpida en la cara.
─ No vuelvas a decir eso, al menos no frente a mi. ─Dijo el muchacho de forma seria, Michael aunque preguntó el por qué no decirlo, terminó por hacer caso a las palabras del chico.
¿Pasamos la meta ya? 👀💕
