─¿Entonces es verdad? ─Interrogó la muchacha observando fijamente el rostro somnoliento de su amigo. Este suspiró negando.
─No te creo, has estado distante, ya no se juntan, ni te folla en el cole, creo que algo está pasando allí ─Recriminó el moreno con un rostro pensativo.
─Luke y yo somos distintos, es verdad que tenemos una conexión especial, pero él es una persona con un futuro, alguien que sabe lo que quiere hacer, en cambio yo he perdido todo tipo de ambición por la vida y seguramente en unos años esté tirado en la casa de Eloy o Ashton consumiendo alguna mierda sin trabajo, siendo un músico frustrado. Además, no estoy cansado de él, sólo que estoy sintiendo rechazo hacia su persona y estoy luchando un montón para desechar esa mierda de sentimiento dentro de mi ─Explicó el pelirrojo vomitando las palabras sobre los otros dos.
─¿Por qué mierda sientes rechazo hacia Luke? ─Preguntaron al unísono ambos jóvenes, Michael suspiró.
─Porque siento que él se está quedando con todos mis amigos, siento que tiene más aceptación que yo, tiene unos ojos hermosos y un cabello bonito, tiene un buen cuerpo, tiene lo que me gustaría tener y además las chicas logran ver su lado masculino, lo ven como un hombre, en cambio a mi me ven como el amigo homosexual ─Murmuró el más bajo en un tono avergonzado. Maddie y Calum se observaron para luego suspirar.
─Lo encuentro totalmente estúpido, mejora esa mierda Michael porque si sigues así te quedarás solo ─Calum se levantó y salió seguido de Maddie, el pelirrojo simplemente se volvió a tirar a su cama para dormir.
×
─Que gran amigo diciendo que se quedará solo ¿No? ─Recriminó la muchacha caminando al lado del moreno.
─¿Y qué quieres que le diga? Es la verdad, no puedo estar a su lado siguiendo cada capricho de su mente ─Se excusó el moreno, la chica suspiró.
─A veces siento que Michael realmente necesita ayuda, quizá no estar internado pero sí alguna pastilla que controle su mente ─Mencionó la muchacha, Calum bufó.
─A veces pienso que Michael sólo está falto de atención y quiere llamar la nuestra sin importar qué ─Opinó el moreno, Maddie se quedó pensativa sin poder reconocer a su amigo.
×
El sueño de Michael duró hasta la madrugada, sus ojos se abrieron y su mirada desorientada intentó reconocer el lugar en el que se encontraba, prendió la linterna de su celular y se quedó observando el techo blanco hasta el amanecer.
Sintió los pasos de su padre ir a la cocina, luego a la habitación de su hermano para despertarle y luego volver a la cocina a preparar el desayuno, sintió los pasos de su hermano bajar las escaleras hacia la cocina, sintió todo el recorrido de ambos para luego sentir tan sólo el silencio de la casa vacía. Intentó volver a dormir aunque fuera una sola hora pero le fue imposible así que sin más se levantó directo a la ducha.
No tardó demasiado, se vistió y salió a comprar alguna cosa para comer. En el recorrido se encontró con la madre de una de sus mejores amigas, una amiga de la infancia cuatro años mayor que él, pero con una mentalidad menor. Lamentablemente la amistad de ellos había terminado por una estupidez, pero ambos se seguían teniendo un enorme cariño.
Michael preguntó a la mujer como se encontraba la chica, prefirió jamás haber preguntado por ella.
Los labios de aquella madre desconsolada se movieron en cámara lenta para Michael.
─Ella está en coma...
