Aquel día, en las últimas horas de clase los chicos decidieron sentarse juntos en los últimos puestos solamente para joder y es que a ninguno le agradaba esas clases y tampoco es como si el profesor les pusiera problemas cuando ellos no hacían las debidas tareas. Calum y Adam quienes eran un poco más preocupados por los deberes, se fueron al grupo de quienes sí hacían la tarea para copiar y luego prestar sus apuntes a los chicos que sólo se dedicaban a reír como imbéciles.
Una vez que todos se volvieron a reunir, las risas se tornaron más fuerte y los temas de conversación cada vez más estúpidos, hablaban desde cosas serias hasta cosas sin sentido como los penes de dos metros que Calum había visto en algún minuto.
─ ¿Sabes lo incómodo que debe ser esa mierda? ─Preguntó de pronto Luke quien copiaba la tarea junto a Mike, los chicos rieron.
─ Sí, sería extraño aunque se la podría enrollar como cinturón. ─Mencionó Adam, los hombres del grupo rieron sin embargo Maddie golpeó el hombro del muchacho reclamándole por que era asqueroso imaginarlo.
─ ¿Por qué mierda hablamos de penes de dos metros? ─Preguntó Lily entre risas.
─ Son los gustos de Calum, déjenlo. ─Molestó Michael riendo de una peculiar manera que causaba risa en los demás, era como si estuviese drogado.
─ Michael se drogó. ─Acusó Michelle riendo, Luke le observó detenidamente.
─ Si no compartes es vicio. ─Terminó por decir y todos rieron nuevamente.
De pronto el silencio inundó al pequeño y bullicioso grupo hasta que Amy de la nada preguntó a Mike si Muke era real, este a modo de joder al rubio negó ante la pregunta y todos los chicos pusieron rostros sorprendidos.
─ Que feo, te negó. ─Molestó Adam, Michael rió y Luke puso un rostro ofendido para luego decir que la relación de había terminado lo cual claramente era mentira.
En medio de toda la joda Mike intentaba besar a Luke pero este se negaba por lo que el teñido ya molesto habló.
─ ¿¡Por qué no me quieres dar un beso!? ─Reclamó molesto y justamente al momento de decir aquellas palabras, todos guardaron silencio por lo que el reclamo fue escuchado por todos o por la gran mayoría.
─ ¡Son tan gays! ─Gritó Michelle riendo seguida de las demás chicas, Michael sólo intentaba esconderse en el hombro del rubio pues sentía vergüenza.
Y así pasó el final de las clases hasta la salida en donde Eloy les esperaba como siempre.
