Normalmente él no era de relaciones serias, era un chico que le gustaba divertirse con cualquiera que le brindara un buen rato y aunque para algunas personas aquello era inmoral, él no se inmutaba por nada ni nadie. Había construido su propia moral y criterio, y en base a esto hacía la mierda que él consideraba correcta.
Su relación más larga fue junto a Cárter, casi cinco meses saliendo, algo que sin duda Michael aún no asemejaba. Se aburría muy rápido en sus relaciones, aún así, esperaba a que la otra persona perdiera el interés y ellos terminaran con él, y fingía que le partían el corazón solamente para no ser él quien parta el corazón de los demás. Así que nunca se sabía si Michael estaba realmente enamorado o no, hasta que llegó Cárter.Michael había pensado seriamente en decir a sus padres que era Gay y escapar junto a Cárter, agradecía a dios que Calum estaba constantemente a su lado advirtiéndole que aquello era una puta locura que no traería buenas consecuencias, realmente lo agradecía porque días después Cárter le dejó.
Luke era ahora su novio, pero no era la misma sensación que con Cárter. Luke era más amigo que pareja y no había diferencia entre ser novios o amigos porque Michael igual tenía sexo con sus amigos, pero a pesar de todo, sentía un extraño amor por aquel joven rubio que se encontraba tirado en su cama fumando un cigarrillo ya casi consumido.
─ ¿En qué piensas? ─Preguntó el rubio tirando el humo en el rostro del muchacho, este arrugó su nariz en una mueca.
─ ¿Qué somos? ─Preguntó Michael observándolo, Luke le miró con extrañeza. Besó sus labios subiendo el volumen a la música ya que el padre del teñido estaba en casa junto a su madre.
─ Somos novios, amigos y más. ─Respondió el rubio al término del beso, Michael sonrió abrazándolo con fuerzas. Luke era más que Cárter.
Siguieron tirados en la cama del teñido mientras escuchaban Green Day. Sus dedos meñiques estaban entrelazados con fuerza, como si tuvieran temor a estar separados, y era muy probable que lo tuvieran.
