Había perdido la cuenta de las veces en las que había visto la hora, parecía estar en su contra y es que cada vez avanzaba más y más rápido y no podía irse de allí por miedo de dejar al mayor solo. Eloy y Amy discutían, el mayor a veces se acercaba peligrosamente a la chica y Michael juraba que podría golpearla por lo que se había puesto cerca de unas piedras en caso de cualquier cosa. El chico que iba junto a Amy se mantenía a un lado esperando que ambos hablaran.
Finalmente la larga charla terminó, Eloy observó a Mike y este le siguió rápidamente. Al momento de pasar por el lado del joven acompañante, Eloy le empujó y siguió su camino. Michael suspiró y abrazó al mayor quien tuvo que agacharse para poder corresponder dicho abrazo.
Ambos se encaminaron hacia la casa del mayor, Mike no se atrevía a dejarlo libre por las calles en esa condición por lo que le obligó a ir a su casa y no se fue hasta ver que este estaba dentro ya fuera de peligro.
Al llegar a casa tuvo que mentir diciendo que surgió un ensayo de último momento y por ello su tardanza.
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El viernes, Michael llegó tarde a clases y antes de entrar al salón se detuvo a hablar con un profesor. Mientras hablaban, a su lado llegó un compañero con un pequeño felino en sus brazos, el teñido con sus ojos brillantes le pidió tomarlo y el otro cedió ante dicha petición.
Estaba sumergido en la conversación a tal punto que ni cuenta se dio cuando su compañero desapareció dejándole a cargo del gato el cual debía ser entregado a una profesora.
Cuando la conversación terminó, Michael metió al felino dentro de su poleron para brindarle protección y de esta forma se dirigió a su salón. A penas entrar a este, varias miradas se posaron en él, o más bien en el gato que él llevaba.
─¿Qué haces con el gato de Aaron? ─Preguntó Calum extrañado.
─Me dejó a cargo, tengo que entregarlo a una profesora ─Michael se encogió de hombros sentándose en su asiento junto al minino.
─¿Y vino? ─Preguntó Luke dando mimos al felino menor.
─No sé, tú y Adam irán a buscarla en el recreo ─Ordenó Mike con una sonrisa, Luke suspiró asintiendo.
La clase pasó normal, entre risas y maullidos que Mike intentaba ocultar.
