A través De Mi Ventana [En Edición]

Capítulo 23

- ¡Hey Jason! - Esas eran las únicas palabras que había formulado de momento desde que apareció.

Yo estaba embelesada, embobada, intentando asimilar lo que se hallaba frente a mí.
Era realmente mono...

Lo raro es que su rostro me era extrañamente familiar, pero no conseguía saber de que... De donde... Él, por su parte se dedico a mirar a su alrededor, analizando y memorizando cada parte de la casa, cada recoveco, cada ventana, cada grieta, cada arbusto...

En eso me recuerda a mí.

Hasta que se percato de que tenía un individuo, lo que se dice "No identificado" frente a sí; y muy lentamente fue bajando su mirada hasta que nuestros ojos se encontraron.

Me miraba extrañado... Como si... ¿Intentara descifrar algo tal vez? ¿Leer mi mente? ¿Ver mi interior? ¿O tal vez como los locos estos de la televisión que intentan "Descifrar y ver tu alma"?

- Lo siento, perdona mis modales me llamo... Eh... Logan - Dijo dubitativo... La verdad es que este chico me sonaba mucho de algo, pero por más que pensaba no encontraba el motivo... El por que...

- Y-yo Hindana, en-encantada - No entiendo el motivo pero mi voz sonaba quebrada, las palabras emanaban de mi de forma atropellada, entrecortadas...

- Así que tu eres la inquilina de esta casa... - Dijo mirándome con una sonrisa de lado, que daba a entender que era un chico travieso, y eso me enloquecía.

- Sí, bueno... - Se me caía la cara de vergüenza "Inquilina" me había llamado como si nada...

¿¡Qué narices le había contado ese maldito Jason!?

- ¿Bueno ya os conocéis no? Pues venga vamos para dentro que hace mucho calor aquí fuera - Señalando el interior de la casa - Hindana, espera nos aquí, nosotros cogeremos las maletas.

Yo asentí y antes de meterme dentro de la casa, me volteé a analizar el rostro de aquel chico, digo... ¿Logan?

Entre los dos cogieron las maletas como si tan solo fueran sacos de algodón, y las fueron metiendo en la casa, mientras yo me encontraba ya dentro de esta, observándoles detrás de la puerta quieta como si de un póster me tratase.

¿Qué narices estoy haciendo? ¡Piernas respondan de una vez!

Después de un rato, cuando ya habían metido todas las cajas me acerque a la entrada del jardín y cerré la pequeña puertecita blanca de la valla de madera que separaba la casa de la acera y corrí a meterme dentro de casa, pero entonces Logan se acercó a mí, y me susurro algo al oído, en bajo con la intención de que Jason no nos oyera...

- Encantado de conocerte Hindanna - Algo en mi reconoció esa dulce voz. Era extraño, porque dijo mi nombre con una cierta familiaridad y calidez, como si ya nos conociésemos de toda la vida...

Estaba segura de que en otro sitio, en otro lugar, en otro tiempo, o en otra vida ¿Quién sabe? Yo había conocido a aquel chico. Y ponía la mano en el fuego de que lo que decía, era cierto.

Tras decirme eso, mis mejillas adquirieron un color rosado en contra de mi voluntad, y mi piel se erizó. Sin pensármelo dos veces me tape la cara de la vergüenza

¿Por qué me sonrojé?

No entendía el porqué de esa reacción, - Haber el chico era guapillo pero nada más, ahí se quedaba todo, y así seguiría - Aun así les seguí a dentro, pero debía admitir que ya no querría volver a mirarle a la cara, por simple vergüenza.
Y cuando por fin me asegure de que todos estuviéramos dentro cerré la puerta principal con llave, y apoye la espalda derrotada por el cansancio acumulado de las noches anteriores en vela con los libros en las manos estudiando al máximo.

Realmente estaba cansada, y mis músculos, cabeza y ojos lo indicaban, pedían a voces que regresase por donde había venido, y volviese a meterme en la cama de inmediato.