AMOR © (Tú, simplemente).

Capítulo 62

PRIMER MES.

Si digo que las cosas en mi matrimonio van de maravilla, me quedaría corta; nuestros días son cortos, pero nuestras noches son eternas, salimos a cenar, vamos al cine, me lleva al teatro y cada noche al volver a casa, reafirma su amor por mí. Incluso Penélope a notado que nuestra relación se a vuelto más pasional, lo que de cierta manera me hace dudar de ella, su vida amorosa va viento en popa y la felicidad en su rostro es prueba de ello, pero cada vez que le pregunto sobre su vida con Alex, se limita a responder un simple "Bien" y eso solo me intriga más. Por otro lado Pamela viene ocasionalmente y hace que mis días sean muy divertidos y entretenidos, lidiar con las travesuras de Lucy quién no se mantiene quieta, me entretiene y me hacen pensar en mis posibles hijos, me pregunto si serán tan bellos cómo Lucy, la pequeña pelinegra de mirada azulada que por lo que escucho ya empieza a romper corazones y deja ver el padre celoso y posesivo que puede llegar a ser Dereck, Pamela se complace al ver el gran padre que es, pero suele hacerla enojar seguido y más cuándo decide pelear con otros padres por no controlar el interés que sus pequeños hijos le muestran a Lucy. Los días de paseo por el parque, son especialmente divertidos.

Michelle es quién más preocupa a Theo, se le a metido en la cabeza en viajar a España y quedarse un tiempo allá; cree que es momento de buscar que hacer con su vida, ya que sus hijos están casados y han creado sus propias familias. Entiendo a lo que se refiere o al menos me doy una idea de sus razones, nos dejo en claro que no importa cuánto mostremos nuestro desacuerdo, ella se irá después de celebrar el cumpleaños de su nieta y su hijo. Theo esta reacio a querer entenderla y menos ahora que descubrió que su mamá le oculta algo, me tiene intrigada su secreto o la "Sorpresa" cómo ella lo llama, pero verla sonreír y ser feliz debería de ser suficiente para Theo.

Respecto a tener nuestros hijos me llena de felicidad de hacer realidad nuestros deseos, es por eso que tomé la decisiones de suspender la toma de mis pastillas anticonceptivas, no le he dicho nada a Theo, planeo que nuestro hijo llegue en el momento en que lo desee, sin tener que preocuparnos en si ya estoy embarazada o no. Nuestro viaje nos ayudará a lograr el propósito.

Martha nos pidió permiso para faltar unos meses, más bien renuncio y nos tomó de sorpresa a ambos; nos explico que planea prepararse para por fin acercarse a su nieta y confesarle la verdad, entendimos a la perfección su decisión, pero renunciar era al innecesario, acordamos que nos veríamos después de vacaciones y que si lo quería, el trabajo estaría disponible para ella.

Sobre el tema de Daniel el cuál todos han querido ignorar, me preocupa, lleva un año estando en Europa, concentrado en sus proyectos o al menos eso es lo que dijo, después de eso no volvimos a saber de él y preocupados Theo hizo uso de algunos contactos al igual que Alex y pudieron dar con su paradero, pero ni así lograron contactarlo y pude notar la decepción en Alex quién herido decidió no molestarlo más; a los pocos días Daniel llamo a su madre y le explico que estaba bien y que el trabajo lo mantenía muy ocupado, que no debía de preocuparse por él ya que estaba bien y sano. Cuándo Theo me lo comento fue imposible que creyera en sus palabras, por fin entendí que él también tenía interés en Penélope y fue doloroso para él presenciar cómo la mujer que quería prefería a su hermano. Quiero creer que mantenerse alejado es la mejor forma que pudo encontrar para no lastimarse.

Hace unos días salí a dar una vuelta en mi motocicleta y la sensación de adrenalina y gozo surgió de nuevo;  hacía ya tanto tiempo que no me tomaba el tiempo de hacerlo y revivir la experiencia me lleno de placer. Ese día decidí ir a mi apartamento y para sorpresa de ambos chocamos cómo la primera vez que nos conocimos; Neithan se veía demacrado y desganado, insistí en saber que ocurría, pero su negación me hizo desistir, se marcho dejándome atónita por el reacio comportamiento, pero mi curiosidad no duro mucho, ya qué Penélope me explico el por qué de su comportamiento. Me contó que hace unos días termino con su novia y de la manera menos inesperada; por la manera de lástima en que redacto lo sucedido pude descubrir que su novia le fue infiel con una mujer, ni yo podía creer que lo me imaginaba, pero cuándo Penélope lo confirme, sentí pena por él. Estando en medio de la conversación quise aprovechar el momento y sacarle la sopa sobre ese secreto que cuida ferozmente, pero no logré obtener nada, así que mejor decidí irme ya que Theo llegaría pronto a casa.

Al llegar al estacionamiento me encontré con Neitha que dado a su estado de ebriedad le era imposible mantenerse en pie con la moto, lo detuve pero él insistía en que lo dejara marcharse; su aspecto era aun más peor que en el de la mañana que nos encontramos. Con ojos llorosos y con ese dolor consumidor me abrazo, lloro sin pena por un largo momento, quise alejarlo, pero no pude hacerlo, su pena es grande y penetrante, así que espere a que se tranquilizara... "Yo de verdad la amaba, habíamos vivido tantas cosas que por fin pude tener la seguridad de querer vivir con ella toda mi vida... Pero ahora, eso nunca pasara" Su temblorosa voz apenas y podía pronuncias las palabras con claridad; al recobrarme de su confesión lo aleje y lo obligue a subir a su departamento, morir ahora no resolvería nada y él debe de ser consciente del dolor que le ocasionara a su familia.

No sé cómo reaccionaría yo si estuviera en su situación, lo único de lo que estoy segura, es que mi corazón se rompería sin oportunidad de repararse de nuevo.

Cuándo llegue a casa busque a Theo quién había decidido salir antes del trabajo, quería sorprenderme, pero el sorprendido fue él; le conté lo ocurrido y el comportamiento herido de Neitha, pero cómo siempre sus celosos irracionales no lo dejaron ver la verdadera razón por que deje que me abrazara. Cansada de sus celosos le asegure que si continuaba así no volvería a contarle nada, se tranquilizo y dejo que terminara de hablar; después de eso ambos nos mantuvimos en silencio y comprendí que tampoco me gustaría la idea de que Liana volviera y se acercara a él de esa manera

Los días eran perfectos, estaba viviendo una vida llena de amor, una vida que me hacía feliz y no solo por los buenos momentos, vaya solemos tener días muy malos, días en que nos molestamos, discutimos y dormimos sin abrazarnos... Pero amo vivir cada día a su lado, amo estar aquí y ser yo quién ve su lado romántico, su lado malo y esos momentos en los que... Nos entregamos, donde nos amamos sin límites, donde nuestros cuerpos hablan y nuestras almas sienten; donde dejamos ser dos, para ser uno.

Por las tardes cuando Martha se va, me subo a mi moto y conduzco por la carretera durante horas, los primeros días me sentí observada, una sensación diferente que me obligaba a ver a mi alrededor y aunque decidí no prestarle atención, la sensación seguía gritando desde adentro. Oculte mi sentir de Theo y así evitar que su preocupación por mi seguridad interfiriera en mi rutina y privacidad, conociéndolo cómo lo hago me prohibiría salir de nuevo sola, me mantendría vigilada y controlada todo el tiempo, y eso es algo que quiero evitar... Martha me comento que ayer que estuve fuera en mi recorrido habitual, un hombre se detuvo frente a la reja y permaneció ahí, solo observando la casa, eso no le gusto, así que salió y lo enfrento, pero él solo pregunto si vivía aquí a lo cuál ella se negó en hablar sobre los dueños de la casa. Ese comportamiento es algo que no le gusto, así que pensó en decírselo a Theo, pero le aseguré que yo lo haría; pero con pena y preocupación me dijo que ya se lo había notificado.

Resignada quise hablar con él, pero su iracundo estado me lo impidió y para aumentar la mala suerte, esa misma noche apareció de nuevo, Martha le dijo que el hombre había vuelto y si darme tiempo a detenerlo corrió hasta el interfono, pero al verlo por las cámaras quedo atónito y descolocado, así que curiosa observe eso que lo había puesto pálido. Quién estaba frente a la puerta, era John, dudaba si tocar el timbre o marcharse, indeciso e inseguro decidió irse por dónde vino.

Theo paso un largo rato hablando sobre él y el parecido con Anabell, pude notar la confusión acompañada de sorpresa y exitismo, por fin pude entender mi actitud al correr y buscarlo, él se convención de que si podría haber sido su hijo, pero cansada del tema lo cerré y fue a dormir.