TERCER MES.
Desde el incidente nuestra relación se deterioro y creo un abismo entre ambos, poco a poco nos distanciamos y nos sumergimos en nuestras actividades, dejando de lado lo bello que nos unía. Sabía que cuándo Daniel se marcho, la noche no sería la misma, pero jamás me paso por la mente que Theo podría actuar así, aún viéndolo mi mente se mostraba escéptica por su comportamiento.
Todos continúan con su vida, Alex tiene muchos planes y eso lo lleva a Alemania, se mudaran por unas semanas y abrirá un club, Theo esta de acuerdo con él y aprueba el lugar que planea usar, lo que más le gusto es que tiene tres salidas de emergencia y una amplia oficina con salida privada, lo más tentador es el buen precio que le ofrecieron. Penélope me agradeció por dejarla vivir en el departamento, pero planea irse con Alex, así que me devolvió las llaves y me aseguro que todo esta tal cual lo deje. Estoy feliz de por ellos, por la vida que planean tener y por su embarazo, no lo planearon pero su felicidad muestra que eso no les preocupo nunca.
Todos avanzan y siento que yo soy la única que no lo hace, me siento estancada y que no hago nada de provecho. Debido a la negativa de Theo sobre Tomas, Michelle decidió irse a España y darle tiempo a Theo para que cambie su comportamiento y acepte de una buena vez que no tiene autoridad para interferir en su vida ni en sus decisiones; por otro lado Pamela viajo a Londres con la familia de Dereck y planean quedarse unas semanas, eso me entristeció, durante ese tiempo no veré a Lucy, hasta ahora soy consciente de lo dependiente que me volví de Lucy y su risa.
Martha se marcho hace unos días y la casa se siente vacía y solitaria, ahora volví a sentirme cómo antes y para mi mala suerte; Theo me acaba de decir que hará un viaje y es probable que este fuera durante una semana, al inicio me desagrado la idea y pensé en pedirle que me llevara con él, pero luego lo pensé mejor y entendí que si no lo había pedido, era porque no quería mi compañía, y eso lo acepto, va por negocios, no para socializar... Pero todo cambio el día que tome su móvil cuándo sonó, curiosa y sin un motivo exacto, abrí el mensaje, con cada palabra que leía mi mundo caía en pedazos... "Lamento molestar, sé que no hay nada que conversar, pero quiero corroborar tu llegada, sé cuánto odias la ineptitud" con ojos llorosos y con las manos temblorosas mire el remitente "Liana" No entendía que es lo que estaba ocurriendo, no podía comprender el motivo de su mensaje.
Cobardemente hui de allí y me refugie en la privacidad de mi departamento, no sabía cómo debía tomar las cosas y más que nada, esperaba con todo mmi corazón que no fuera cierto, yo no quería ver su engaño, la traición que escondía con ese viaje e hice lo mejor para ambos, distancia era lo que necesitaba. Por la noche mi móvil se lleno de mensajes desesperados y llamadas no contestadas, su insistencia no me dejaba dormir, no es que pudiera conciliar el sueño, pero sus llamadas no ayudaban a tranquilizarme ¿Cómo podía hacerme esto? ¿Es que acaso jamás fui suficiente? ¿Jamás pudo amarme realmente? Mi mente no dejaba de torturarme con preguntas dolorosas y lo peor es que no tenían respuestas. Así que tome todo el coraje y me llene de valor para enfrente la verdad.
Volví a casa y él esperaba por mí, la copa en su mano dejo entre ver la angustiante noche que estaba pasando, no podía culpar, me fui y no di ninguna explicación. No sabía por dónde comenzar, confesar que había husmeado en su móvil, no me haría ver bien y eso nos podía tensos, más que nada porque tenía el presentimiento de que él ya sabía lo que ocurría "Ambos sabemos lo que ocurre, así que cómo adultos que somos, hablaremos al respecto. Es cierto que te oculte mi reunión con ella, la idea principal no era reunirme con ella, de verdad tengo negocios que hacer en Italia, solo que pensé que si lo sabía ocurriría esto y eso fue lo que sucedió . No confiaste en mí" Rio con ironía y lo señalo airada "Hablas de confianza cuándo fuiste tú quién oculto lo que sucedía" Asiente y sin decir nada más me dejo sola en la entrada, sabía que no podríamos arreglar las cosas... "Te dije que cometí muchos errores por ella, y el peor de ellos fue acceder a darle la cadena hotelera de mi familia, lo hice porque me lo pidió y decidí confiar. El contrato me daría lo necesario para tenerla de vuelta y por fin, darle a mi familia lo que les arrebate" Al regresar me miro por unos minutos y por fin se marcho; lo vi desaparecer el oscuridad de las escaleras.
Todo lo malo que sentía y las dudas, quedaron borradas de mí, me sentí estúpida y muy ingenua, debí preguntar directamente y no hacerme ideas tontas, sabía dentro de mí, que él jamás me haría algo cómo eso. Apague la luz de la entrada y me recosté en el sofá de la sala, no tenía el valor para verlo ahora.
No se fue a Italia y eso de una mala manera me hacía sentir inmensamente feliz, no sé cómo no me di cuenta antes lo importante que es para él tener dinero e ir multiplicándolo; esa noche se sentó en la cama y me obligo a sentarme a su lado, me tomo de la cintura y me pego a él, estaba llorando, todo su rostro estaba empapado de lágrimas que había derramado y que seguía haciéndolo, beso mi mejilla y mi corazón dolió al ver su mirada llena de dolor y agonía.
En la mañana que desperté, todo estaba en silencio y me sentí mal por no haberme despedido de él, pero para mi sorpresa entro a la sala con la bandeja de desayuno y se sentó a mi lado, no se fue y me sentía peor, mi comportamiento errático de anoche creo esta respuesta, debí haberlo hablado desde un inicio y evitar una perdida tan grande.
Ahora entiendo el porque siempre se esfuerza por aumentar sus ganancias, por que siempre busca extender su negocio; todo lo hace por el error que sigue cargando a pesar de tantos años.
No merezco que este hombre me ame tanto cómo lo hace, es por eso que a partir de ahora, no volveré a desconfiar de él. Nunca más.
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AMOR © (Tú, simplemente).
RomanceDos almas tomadas presas del destino, con todo y nada en común, pero incluso los opuestos se atraen, de tal manera que hasta el destino sucumbe ante tanta fuerza. Al destino le encanta jugar y ver cómo luchamos contra lo inevitable, solo esperemos q...